Toda la cadena de la industria agroalimentaria de Euskadi, que representa cerca del 10% de su PIB, ha estado y sigue estando a la altura durante la pandemia. La crisis sociosanitaria, con devastadores efectos en la economía, ha puesto de manifiesto el acierto de los avances tecnológicos introducidos en el sector, especialmente la automatización y la digitalización de la producción, la manipulación y el envasado, el transporte y la comercialización. En este último apartado destaca el aumento de las ventas online, que han supuesto un revulsivo para mantener muchos negocios. Por otro lado, la alimentación saludable destaca como prioridad estra
Si algo ha puesto de manifiesto el covid ha sido la necesidad de contar con un sistema sanitario innovador, capaz de hacer frente a amenazas graves, imprevistas y desconocidas. La digitalización hace tiempo ya que dejó de ser una opción para convertirse en una exigencia urgente para cualquier tipo de organización. Sectores como el sociosanitario, en su dimensión pública y privada, y el del comercio han acelerado sus procesos en este terreno. Por su parte, los servicios avanzados, fundamentalmente la consultoría de innovación, se consolidan como aliados imprescindibles. La pandemia ha demostrado que las soluciones digitales no son algo opcio