La cooperativa alavesa Udapa, uno de los grandes productores y comercializadores de patata a nivel del Estado, está llevando a cabo un plan inversor para hacer más sostenible su actividad agroalimentaria.

“Es cierto que el cuidado del medio ambiente siempre ha sido uno de los principales pilares por el cual se ha regido la cooperativa, y aunque desde nuestros inicios hemos puesto en marcha varios proyectos que estaban enfocados al cuidado y desarrollo del entorno (y por los que hemos recibido varios premios y reconocimientos), la verdad es que en estos últimos meses nos hemos centrado aún más en este empeño”, afirma Alfonso Sáenz de Cámara, gerente de la cooperativa alavesa Udapa.
La cooperativa está inmersa en un plan plurianual de inversiones, por valor de 9,5 millones de euros, destinado a mejoras tecnológicas y a la puesta en marcha de nuevas líneas de producción, pero también a proyectos medioambientales, fundamentalmente en las instalaciones de su planta ubicada en el polígono de Jundiz. Incluye, por ejemplo, la incorporación, en 2021, de dos nuevas líneas de lavado, que están permitiendo a la cooperativa ahorrar un 40% en el consumo de agua.
El desembolso principal de Udapa tiene como fin la puesta en marcha de una nueva sala de fabricación que integrará robótica y visión artificial de última generación en sus instalaciones centrales en Jundiz, que la empresa prevé esté finalizada este mismo mes de septiembre. “No solo mejorará la productividad, la calidad de los productos o la ergonomía de la plantilla, sino que también nos permitirá trabajar con materiales de envasado más sostenibles, como son los 100% celulósicos o monomateriales 100% reciclables”, subraya Sáenz de Cámara.
La cooperativa participa, por otro lado, en el proyecto ‘Ontin Food’, impulsado por el Basque Food Cluster y el centro tecnológico Gaiker, y financiado por la sociedad pública Ihobe.

Participa con Gaiker en el proyecto
‘Ontin Food’ para reducir el impacto
ambiental de sus envases

Su objetivo es, según explica Sáenz de Cámara, “formar en las bases del ecodiseño para reducir el impacto ambiental de envases y embalajes en la cadena alimentaria”.
La sensibilidad medioambiental de Udapa, que agrupa a un buen número de productores de patata, está también detrás de su inversión para la reducción del ancho de las bandas de las patatas de marca propia y el cambio de una malla extrusionada por una malla tejida ultraligera que le permitirá ahorrar entre un 40% y 50% de plástico.
Finalmente, la cooperativa alavesa prevé destinar 400.000 euros a la compra de placas solares fotovoltaicas, que serán instaladas en la cubierta de su planta de recepción y conservación de las patatas, para así poder abastecerse de energía verde.