La realidad avanza muy rápido y lo que se escribe hace 15 días se ve superado por los acontecimientos. El coronavirus ya es pandemia global y Euskadi está afectada de forma notable en lo social y en lo económico. Ya no es solo la afección del parón de la economía china. Ahora están encima de la mesa las repercusiones de lo que puede ser una paralización de la economía global. Una situación totalmente nueva y desconocida, que veremos cómo se maneja. Hay quien apuesta por hacer un ‘reset’ total de dos meses y quien incide en medidas de contención. Las instituciones, como es lógico, tienen como primer objetivo contener la crisis sanitaria. Y l
La incidencia de la epidemia del coronavirus marcará un antes y un después en la marcha de la economía. En el inicio de 2020, a una situación previa de incertidumbre por la repercusión de la guerra comercial EE.UU.-China, el incremento de los aranceles y las consecuencias del Brexit para la UE, se han sumado los efectos que está teniendo el virus en el crecimiento económico internacional. En las últimas semanas, la crisis sanitaria ha afectado a la producción, a la distribución y al consumo generando una serie de tensiones socioeconómicas que, cuando se normalice y se controle el proceso vírico, harán falta medidas y recursos para recupera