Todos hemos visto cómo, casi de un día para otro, la Covid-19 ha alterado muchas cosas a nuestro alrededor. Algunos de esos cambios se hicieron evidentes desde muy pronto. Otros, en cambio, han pasado más desapercibidos y es a estos a los que quiero dedicar este artículo porque de ellos pueden derivar muchas oportunidades que podemos aprovechar para ser, individual y colectivamente, mejores. Creo firmemente que pronto podremos echar la vista atrás y, sin olvidar la gravedad de lo vivido, pensar en lo que el día (de mañana) le debe a la noche (de hoy). El primer cambio que quiero constatar es la percepción que la sociedad tiene de la invest
Resulta inevitable arrancar esta reflexión anual mencionando el hecho más destacado acaecido en el año 2020 y que más incidencia ha tenido en la evolución económica y en el sector energético: la pandemia del covid-19. Las repercusiones en la actividad han sido tan relevantes que, sin lugar a dudas, se tardará muchos años en olvidar su impacto y otros tantos en lograr superarlo ya que algunos de sus efectos podrían traspasar la barrera de lo coyuntural, llegando incluso a tener consecuencias estructurales. En efecto, la energía no ha sido ajena a esta convulsión que ha propiciado descensos muy importantes en el consumo energético mundial. La