La energía eólica y el hidrógeno son dos vectores fundamentales en la transición energética, además de una oportunidad inmejorable para las empresas vascas. La importante cadena de valor en eólica ya existente en nuestro territorio y el desarrollo que se espera vaya a tener en los próximos años el hidrógeno, en torno al cual ya se están produciendo iniciativas y proyectos reales y concretos, ofrece al tejido productivo vasco unas perspectivas de crecimiento enormes. ¿Qué posición ocupan la energía eólica y el hidrógeno en la senda de la transición energética en la que estamos inmersos? Son dos vectores clave. La descarbonización del sector
En plena transición energética, inmersos en la carrera de alcanzar los objetivos de descarbonización planteados para 2030, para lo que va a ser necesario pisar el acelerador, la energía eólica y el hidrógeno se presentan como dos vectores clave, herramientas esenciales en la consecución de esas metas. Mucho más consolidada y madura en Euskadi la eólica, tanto en términos industriales como de producción, el hidrógeno ha dejado de ser una entelequia que sólo se hacía realidad en el imaginario de los más optimistas. En Euskadi no sólo están empezando a suceder cosas concretas sino que se trata de un territorio que aúna todos los condicionantes p