En una visita a Finlandia, hace ahora algunos meses, sentí sana envidia por que un lugar tan frío y con tan pocas horas de luz haya sabido dar calor a la innovación hasta convertirla en parte de su idiosincrasia, en una apuesta de país. Hace ya años que los países hoy más avanzados, entre ellos los escandinavos, interiorizaron que la innovación, entendida ésta en sentido amplio, constituye la inversión más rentable, económica y socialmente. La innovación es el ingrediente clave para garantizar la competitividad presente y futura del tejido económico, científico y social de un país. Es gran palanca para la competitividad, que permite además
Ya sea en nuestras empresas, en las instituciones o en las asociaciones en las que participamos, en nuestra vida diaria resulta necesario imaginarse un futuro y unas metas que nos permitan avanzar y mejorar. Precisamente por ello, desde la Diputación de Gipuzkoa compartimos una visión de futuro de un territorio renovado que tratamos de construir y de compartir con los agentes económico-sociales y personas de la sociedad guipuzcoana. Si queremos avanzar en esa idea de territorio renovado, competitivo, inteligente y creativo y, si además, deseamos mantener una economía dinámica, equilibrada, en constante evolución, que sirva para garantizar
