2020 ha sido un año pésimo, sin paliativos, con una crisis sanitaria sin precedentes que nos ha abocado a una crisis económica complicada. Al Puerto de Bilbao, además, se le sumó una huelga de estiba muy dura, inoportuna por la situación que atravesábamos e ilógica por los motivos de la misma, que ha derivado en pérdida de clientes, de tráficos y, lo más difícil de recuperar, de confianza. Todo ello ha hecho que cerremos en números negativos una buena parte de las empresas que trabajamos en el puerto y con el puerto. En la otra cara de la moneda están las inversiones anunciadas para los próximos cuatro años, con 206,5 millones de euros de i
Ha pasado más de un año desde el inicio de las restricciones para contener la propagación de COVID-19 en Europa y en la mayor parte del mundo, coincidiendo con lo que ahora denominamos la primera ola. El impacto personal para todos nosotros ha sido destacado, además de la incertidumbre en los negocios y ecosistema empresarial. Esta incertidumbre profesional se ha trasladado a todos los niveles: económico/político, financiero, operativo/negocios, clientes y talento/HR. En todos estos meses hemos visto cómo se ha consolidado la opción del teletrabajo; eso sí, para algunos sectores de actividad y profesiones que permiten desarrollar la activid