Introduce el contenido aquí A nadie se le escapa que nos encontramos ante un momento caracterizado por la incertidumbre y la inestabilidad económica, la redefinición de las cadenas de suministro, la eliminación de dependencias externas que ponen en riesgo nuestra economía y nuestro bienestar, donde la globalización cobra una nueva dimensión, y el arraigo de lo local adquiere gran relevancia. Nos enfrentamos a grandes transformaciones sociales y económicas de las que el cooperativismo no es ajeno, ni pretende serlo. Un contexto actual que no se puede abordar sin entender los tres grandes aceleradores de cambio que están definiendo lo que ser
Cada territorio tiene una estructura económica diferente, que refleja, entre otras cosas, su historia, sus recursos naturales y humanos, su cercanía a distintos mercados y las inversiones que ha ido haciendo a lo largo del tiempo. Sin embargo, la estructura económica no se mantiene estática, sino que va evolucionando según se va adaptando a cambios en los mercados o en las tecnologías, y depende de las ventajas y desventajas que presenta el territorio para la ubicación de distintas actividades. En momentos como el que estamos viviendo en la actualidad, caracterizados por una gran incertidumbre y transiciones profundas, en los que las caract
