Cuando hablamos de cooperativismo, muy habitualmente lo asociamos al territorio vasconavarro, ya que esta forma jurídica de empresa está arraigada en nuestro carácter, muy de trabajo en colaboración y de horizontalidad. Un modelo societario que genera cohesión territorial, empleo digno y bienestar, que devuelve a la sociedad buena parte de lo que recibe de ella. Hay que destacar que la economía social –cooperativas, sociedades laborales y participadas...– ha jugado siempre un papel destacado en el desarrollo y progreso de nuestros territorios. Tampoco es desdeñable el ‘efecto red’ que ha ejercido –desde la reconversión industrial hasta las crisis del siglo XXI–, como garante de la continuidad de muchos proyectos empresariales y de la defensa de miles de empleos. Y, todo ello, desde la igualdad, la solidaridad y el esfuerzo compartido. El ejemplo de sostenibilidad y resiliencia del movimiento cooperativo refuerza, aún más, el peso económico de un colectivo que en las comunidades autónomas de Euskadi y Navarra agrupa a 2.100 empresas con más de 1,7 millones de personas socias; que generan 75.000 empleos y facturan, en conjunto, más de 13.000 millones. Un modelo, en suma, con unos cimientos lo suficientemente sólidos como para seguir creciendo y multiplicando el alcance de su labor, que ya cuenta con el reconocimiento social, y que seguirá trabajando, desde la cooperación, para alcanzar todas sus metas.
Noticias más vistas
- 01Un equipo de CIC bioGUNE descubre una nueva estrategia para tratar el daño hepático por alcohol basada en terapias de ARN
- 02Combinar la experiencia física y digital, evolucionando hacia espacios cada vez más inmersivos e interactivos
- 03El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, inaugura el Tercer Día del Hidrógeno de Enagás
- 04Kursaal y el Palacio Miramar cierran un exitoso 2024 con más de 130.000 asistentes en 345 eventos
- 05BBVA registra un beneficio de 10.054 millones de euros en 2024 (+25%)