¿Imaginamos nuestra vida en off? Nos hemos convertido en seres digitales, en consumidores digitales, lo que nos obligará a rediseñar la industria y los servicios para atender al nuevo perfil de cliente. En definitiva, nos dirigimos hacia una sociedad digital, que abrirá nuevas oportunidades y nuevos mercados, y debemos aprovecharlas. Esa oportunidad creará nuevos empleos, necesitará de nuevos perfiles y sobre todo exigirá al mundo industrial dar pasos en un nuevo camino. Un camino que a veces parecerá difícil, pero que sin duda será beneficioso. Y se preguntarán, ¿por qué digo esto? Les expongo algunos datos. Las empresas digitalizadas
Que estamos en un mundo global es una obviedad. Que la competitividad actual pasa por ofrecer productos y servicios allá donde los mercados lo demandan, es otra. Que la dimensión ayuda para poder atender estas necesidades internacionales, también. Por ello es muy importante aparecer en este mapamundi, en el que los ejes socioeconómicos se están desplazando y Europa ya no está en el centro. Somos un país pequeño con empresas, en general, pequeñas, lo que hace imprescindible no dispersar oportunidades y esfuerzos. La unión hace la fuerza, se suele decir, y con razón. Experiencias como la reciente presencia de la estrategia Basque Industry 4.0