GUÍA DE LA INNOVACIÓN EN EL PAÍS VASCO 2022 "El cooperativismo como nuevo modelo de valor"

Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop

Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop

En un contexto de incertidumbre e inestabilidad económica como el actual, así como las circunstancias excepcionales que vivimos en el ámbito internacional y del conjunto del Estado, nos exigen a todos los actores de la sociedad vasca poner las luces largas y estar a la altura del momento. La constante transformación y la disrupción son hechos que afectan a la economía global, pero están reformulando y reconstruyendo nuestra forma de trabajar, de consumir y de vivir. Nos enfrentamos a grandes transformaciones sociales y económicas de las que el cooperativismo ni es ajeno, ni pretende serlo.
Es más, las empresas cooperativas están contribuyendo a las grandes transformaciones aportando otros modelos de valor, que arraigan con el territorio, generan riqueza, promueven el empleo, son competitivas y se enmarcan en las dos grandes transformaciones del siglo XXI, como son la tecnológica y la sostenible. Porque las cooperativas estamos traccionando estas transiciones que vivimos en Euskadi y lejos de concebirse como una estrategia coyuntural, la economía cooperativa se presenta como una solución de futuro que está transformando la manera en cómo las compañías afrontan la creación de valor y también la manera en que la gente satisface sus necesidades, como herramienta de competitividad.
En un contexto donde la precariedad del empleo figura entre las principales preocupaciones de organizaciones y gobiernos, las empresas cooperativas nos constituimos en un valor seguro para las personas trabajadoras: resistimos mejor las recesiones, creamos empleo de mayor calidad y somos receptoras netas de talento, que formamos e integramos en nuestras empresas cooperativas. Y esto nos permite avanzar en innovaciones que ofrecen soluciones a los retos de las sociedades actuales. Una innovación que hace que las empresas cooperativas de hoy seamos más resilientes y competitivas, y que estemos al servicio de las grandes transformaciones sociales y económicas: desde la transición energética y el cambio climático, a los desafíos tecnológicos y digitales, pasando por la innovación y la consecución de una sociedad más equilibrada, más cohesionada y más justa. 
El tejido cooperativo cuenta con empresas cooperativas que innovan y son pioneras en el ámbito energético y tecnológico, y en todos los sectores donde están presentes: en el ámbito educativo, de consumo, agroalimentario, nanotecnología, silver economy, etc., con un compromiso firme por dar solución a estos retos y ser parte de las soluciones.
Estas transformaciones del mundo del trabajo suponen la necesidad de renovar los espacios donde se definen y deciden las políticas públicas, y, en especial, todas aquellas que tienen que ver con las materias de empleo, para que estas sean capaces de hacer frente a los cambios sociales y económicos a los que nos enfrentamos. Mantenemos nuestra mano tendida a la administración para trabajar mano a mano en los retos a los que se enfrenta el mundo del trabajo, aportando ideas y soluciones que ayuden a diseñar las políticas de empleo del futuro, y, en definitiva, mejorar entre todas y todos los agentes económicos y sociales, la gobernanza de los órganos de participación institucional adecuándola a estas transformaciones.

Más noticias de Opinión / Iritzia