Tanto la producción como el consumo de ropa ha aumentado exponencialmente en los últimos años, debido al modelo de consumo actual. Los datos nos dicen que el impacto ambiental de la industria textil es muy elevado, por lo que es imperativo tomar medidas para tratar de reducirlo. En este sentido, la legislación europea obliga a los países a empezar la recogida selectiva de residuos textiles antes del 1 de enero de 2025, y a establecer unos objetivos relativos a la preparación para la reutilización y al reciclado de estos residuos.
Las empresas se enfrentan actualmente al reto de garantizar una gestión sostenible con la presión por mejorar la productividad e incorporar la digitalización y automatización de sus procesos. En este contexto, la consultora SGS integra el pensamiento ‘lean’ y la economía circular bajo el concepto ‘SGS Circular Lean Thinking’, con un enfoque innovador para desarrollar prácticas empresariales sostenibles y eficientes, que buscan reducir el desperdicio y reciclar materiales y energía. Utilizando esta metodología, trabaja en un enfoque capaz de convertir la ‘circularidad’ en parte de la mejora de la cadena de valor de una empresa o negocio hacia