La digitalización ha entrado como un huracán en las empresas de servicios en un espacio muy corto de tiempo. En apenas cuatro años, el pequeño comercio ha tenido que dar un giro a su concepto de competitividad tanto en lo referente a los nuevos hábitos de consumo como al uso de herramientas digitales, bien en las formas de pago, bien como canal promocional e incluso de cumplimiento de obligaciones tributarias, mientras que el área de las consultoras, por su parte, ve como su facturación crece exponencialmente vía proyectos que demandan lo último en tecnología. Un salto hacia la innovación digital que es congénito al sector médico, que ya con