Ya no hay vuelta atrás. Si la transición económica, ecológica, digital y demográfica nos obligaba a reinventarnos, la pandemia del COVID 19 nos obliga a acelerar los cambios. Si arrastrábamos déficits en la estructura de nuestro mercado laboral, por la precarización del empleo y la feminización y cronificación del desempleo, la actual crisis nos exige buscar un modelo innovador e igualitario que favorezca el empleo de calidad. Y si los instrumentos con los que hemos contado no son suficientemente ágiles, tendremos que innovar. Ésta es la oportunidad que se nos presenta: es tiempo para mejorar. Porque de repente un virus ha acabado con nuest
La pandemia ha matasellado como ‘urgente’ el desarrollo e implementación de soluciones etiquetadas hasta comienzos de año simplemente como ‘tendencias’ en ámbitos como la gestión empresarial y el liderazgo, la formación académica y profesional, el emprendimiento y los nuevos modelos de negocio, el empleo, la organización del trabajo y las políticas de conciliación. El covid-19 ha destapado vulnerabilidades pero también ha aflorado fortalezas en un sistema que hoy se ha de mostrar resilente y que en Euskadi apuesta por la innovación, digitalización y sostenibilidad. El coronavirus ha desplegado en Euskadi un escenario nuevo en el que la inno