El Gobierno vasco aprobará este mes una nueva línea de financiación de 500 millones de euros, instrumentada por Elkargi, y a la que se ha adherido asimismo Kutxabank, con el objetivo de responder a las necesidades de liquidez y financiación de circulante de las empresas más afectadas por la pandemia.
Entre las principales novedades, esta nueva línea ampliará hasta los dos años el plazo de carencia opcional y hasta los seis años el plazo de amortización. Además, se reservarán 300 millones de euros para préstamos de menor cuantía, entre los 5.000 y los 25.000 euros, destinados a empresas de menor tamaño y a personas empresarias autónomas, que se podrán beneficiar de un proceso más sencillo y ágil en la tramitación de las solicitudes.

En líneas generales, las firmas interesadas se podrán beneficiar de préstamos que oscilarán entre los 5.000 y el 1.000.000 de euros en el caso de las pequeñas y medianas empresas, y de hasta 100.000 euros si los solicitantes son empresarios individuales o autónomos. El coste financiero de todas las operaciones será del 0%, ya que el tipo de interés estará subvencionado por la Administración, y no tendrán ningún tipo de comisión o gasto adicional.
La nueva línea de financiación fue presentada por el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, y el presidente de Elkargi, Josu Sánchez que reiteraron su objetivo de adaptar las herramientas financieras “a las necesidades reales de nuestro sector económico”.