Todo hacía presagiar que el pasado año 2023 iba a ser el del florecimiento de la actividad siderúrgica en Euskadi. Tras sortear innumerables contratiempos, parecía que el ejercicio iba a cerrar con buena nota. Pues bien, al albur de la coyuntura, la siderurgia ha cerrado año con un descenso del 1,2% en la producción de acero, regresando al nivel registrado en 2020. A juicio de Unesid, la asociación que representa a las empresas productoras de acero y sus productos de primera transformación en España, “a lo largo del pasado año, la industria siderúrgica enfrentó desafíos persistentes debido al alto precio de la energía”. “La media del ‘pool’
Surgió hace tan solo ocho años para centralizar la fabricación de un concepto de galería universal capaz de cubrir cualquier cinta transportadora de esquiadores existente en el mercado. “Hasta ese momento, no existía un producto específico para ese sector y distintas circunstancias nos llevaron a tener la oportunidad de desarrollar ese concepto y posteriormente concentrar su fabricación y evolución”, incide el gerente de Idderman, Carlos Alarcón. De esa necesidad surgió la empresa alavesa con base en Legutio que, con este escaso tiempo de vida, logró una facturación de 3,3 millones de euros durante el pasado año, lo que supone un 50% más que