El País Vasco fue la primera comunidad autónoma del Estado que diseñó una estrategia específica para el desarrollo de las biociencias, denominada BioBasque 2010, que respondía a la necesidad de diversificar el tejido industrial de Euskadi y de aprovechar las nuevas oportunidades derivadas de la sociedad basada en el conocimiento y la innovación. La estrategia cuenta con un experiencia de más de 14 años y mantiene un enfoque global con actuaciones estructuradas hacia la generación de conocimiento, el desarrollo empresarial y la dinamización del bioclúster. El objetivo de diversificación y creación de un nuevo sector empresarial se acompaña de
Las bioempresas encuentran en BioBasque un entorno favorable en Euskadi, apoyado en una base tecnológica, el ‘know how’ en la comunidad científica y en programas de colaboración establecidos hace dos décadas, la facilidad para lograr socios potenciales y herramientas financieras para el lanzamiento y crecimiento de empresas. Entre los apoyos destacan las reducciones de impuestos para firmas que realicen actividades de Investigación y desarrollo+D, inversión privada en I+D convergente con la media europea, así como incentivos para la atracción y empleo de investigadores y otros perfiles profesionales.