La Agenda 2030, el Acuerdo de París sobre el cambio climático y la proclamación de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible han situado la norma ISO 14001 como una de las herramientas básicas de gestión de las empresas de todo el mundo en el logro de los objetivos definidos y comprometidos.

Los últimos datos disponibles revelan que ya son 362.610 los certificados emitidos según la Norma ISO 14001 de Sistemas de Gestión Ambiental en 181 países. Esta certificación, que cada vez llega a un mayor número de empresas, reconoce a aquellas organizaciones que la implantan como ayuda para prevenir posibles impactos ambientales que se pueden generar como consecuencia de su actividad, utilizando los medios necesarios para evitarlos, reducirlos o controlarlos. Todo ello siempre en equilibrio con la racionalidad socioeconómica y apostando por la mejora continua. Este certificado permite además transmitir compromiso de forma directa y creíble, obtener beneficios económicos por la optimización del consumo de energía, materias primas y agua, y por la mejora de los procesos, reducir riesgos legales.

Las empresas españolas son las quintas del mundo y terceras de Europa en el ranking de certificación ISO 14001:2015, con 13.053 certificados. Y, según las cifras que manejan organismos de certificación medioambiental como Aenor e Ihobe, se puede afirmar que el País Vasco se sitúa a la cabeza en el número de empresas que han adoptado Sistemas de Gestión de Calidad Ambiental. Así, la CAV es la primera comunidad autónoma en materia de sostenibilidad al disponer de más de 40 certificados Aenor en el apartado de Ecodiseño (UNE-EN ISO 14006) –la primera norma de la Organización Internacional de Normalización (ISO) con origen en el País Vasco-. Esta cifra representa más de la mitad de certificados de este tipo emitidos por la entidad, que reconocen la labor de las empresas en la reducción de sus impactos ambientales en procesos improductivos o de ‘no calidad’. A esto se añaden las 87 organizaciones inscritas hasta el 8 de marzo de 2018 en el registro comunitario de gestión y auditoria medioambiental EMAS.

La verificación EMAS acredita que las organizaciones cumplen con el Reglamento Europeo de gestión y auditoría, que promueve la mejora del comportamiento ambiental de las organizaciones de todos los sectores. Euskadi ocupa el 5º puesto en Europa en número de certificaciones ambientales EMAS por delante de Francia, Reino Unido o Portugal.
Ahorro energético
Otra certificación relacionada con la responsabilidad medioambiental es la ISO 50001, cuyo crecimiento en 2017 fue de un 13%, alcanzando la cifra de 22.870 en todo el mundo. España ocupa el octavo lugar del ranking y el sexto en Europa, con 568 reconocimientos. Es la herramienta de gestión de la energía más utilizada en todo el mundo. Ayuda a las organizaciones a implantar una política energética y a gestionar adecuadamente los aspectos energéticos derivados de su actividad.
Su implementación ha conseguido generar a las organizaciones un ahorro sistemático de entre el 5% y el 30% del coste energético, según ISO. Además nueve de cada 10 organizaciones que utilizan esta norma la recomiendan.