Aún habiéndose reducido tres puntos en tres años, la brecha salarial en Euskadi sigue en niveles preocupantes. Un congreso ha analizado las causas de esta desigualdad.

Organizado por el departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno vasco, el I Congreso sobre Brecha Salarial ha buscado analizar y reflexionar sobre las causas que siguen originando la desigualdad entre hombres y mujeres en los puestos de trabajo y de decisión en las organizaciones, y también aportar soluciones en su proceso de deconstrucción.
Inaugurado por la vicelehendakari Idoia Mendia, el Foro ha contado con la participación de voces expertas en la materia como, entre otras, Asa Ragnér y Ana Pashalishvili, de ONU Mujeres; la presidenta de la Comisión de Igualdad en el Congreso de los Diputados, Carmen Calvo; la doctora en estudios multidisciplinares de género y consultora Irune Aguirrezabal, que habló sobre la democracia paritaria; Milagros Sainz, directora del grupo de Investigación de Género y TIC de la Universitat Oberta de Catalunya; o Diego Dueñas, economista y profesor de la Universidad de Alcalá, que descompuso el ‘gap’ salarial por género en el mercado de trabajo español.

En palabras de la vicelehendakari Mendia, “atajar la brecha salarial es más que garantizar que, a igual trabajo, igual salario. Es atajar las vías por donde escapan los fundamentos de la democracia: una sociedad de mujeres y hombres plenamente libres, con iguales derechos y oportunidades”. Se trata de un reto democrático, estratégico y transversal para el Gobierno vasco que “debe ser asumido por toda la sociedad”, afirmó.
Mendia apuntó que en Euskadi se ha conseguido reducir la brecha tres puntos en tres años, “hemos pasado de un escandaloso 22,6% a un preocupante 19,5%”, por lo que hacía un llamamiento a “exprimir” las potencialidades de las nuevas herramientas existentes para luchar contra la brecha. En este sentido, aseguró que “la subida del Salario Mínimo Interprofesional y la reforma laboral que acota la temporalidad, junto a los nuevos planes de igualdad y las auditorías salariales deben ser nuevos revulsivos para atajar la gran losa que pesa en la economía, la sociedad y la democracia en España y Euskadi”.
El congreso concluyó con una mesa redonda en la que cinco directivas de Iberdrola, Microsoft, Banco Santander, BlaBlaCar y Tubacex, reflexionaron sobre igualdad de género en la empresa como factor de competitividad.