La pandemia, el aumento de los precios de los bienes, la crisis energética, la falta de suministros y, además, la guerra en Ucrania están poniendo a prueba a la cadena de suministro y los agentes que en ella operan. No obstante, la logística no solo resiste sino que responde a las demandas, adaptándose a las circunstancias y los cambios que se producen en el sector. Y las cifras indican que el sector está en la senda del crecimiento. Uno de los mayores motores de este crecimiento del sector logístico es, sin duda, el comercio electrónico. Esto no es nuevo, pero la pandemia ha supuesto un acelerador de la actividad de los servicios de almace
Sin duda, digitalización, automatización y sostenibilidad, son los tres ejes sobre los que giran las tendencias en Logística. La transformación digital facilita el control de la cadena de suministro, desde el aprovisionamiento, hasta la entrega al cliente del producto final y su retorno. La Logística 4.0 permite una gestión óptima de sus cuatro fases: aprovisionamiento, manufactura, almacenamiento y distribución. Ante las sucesivas crisis que vamos afrontando -sanitaria, energética, bélica-, el incremento exponencial del comercio electrónico y la preocupación por la distribución urbana, la logística se ha revelado como esencial. Y ha respon