La búsqueda de la competitividad empresarial se puede conseguir con el apoyo externos de agentes científico-tecnológicos o desarrollando internamente las capacidades innovadoras. Algo innato a las industrias vascas.
Así, en Euskadi se han fomentado las unidades de I+D empresarial. Los antiguos departamentos de I+D se han constituido como entidad jurídica propia con la misión de servir a la empresa o empresas de las que nacieron, y cerca de 70 de ellas forman ya parte de la Red Vasca de Ciencia, Tecnología e Innovación.
La creación de una Unidad de I+D empresarial permite hacer más eficiente y especializada la organización de los recursos humanos y económicos dedicados a la I+D. Facilita el acceso a personal investigador. Y además, mediante el programa Aldatu se pueden elaborar los estudios necesarios para valorar las alternativas organizativas posibles para la gestión de la I+D en una empresa.
En la actualidad, el 12,7% de las empresas vascas desarrollan actividades de innovación tecnológica, según los datos de la encuesta sobre Innovación en Euskadi del Eustat.
Así, en Euskadi se han fomentado las unidades de I+D empresarial. Los antiguos departamentos de I+D se han constituido como entidad jurídica propia con la misión de servir a la empresa o empresas de las que nacieron, y cerca de 70 de ellas forman ya parte de la Red Vasca de Ciencia, Tecnología e Innovación.
La creación de una Unidad de I+D empresarial permite hacer más eficiente y especializada la organización de los recursos humanos y económicos dedicados a la I+D. Facilita el acceso a personal investigador. Y además, mediante el programa Aldatu se pueden elaborar los estudios necesarios para valorar las alternativas organizativas posibles para la gestión de la I+D en una empresa.
En la actualidad, el 12,7% de las empresas vascas desarrollan actividades de innovación tecnológica, según los datos de la encuesta sobre Innovación en Euskadi del Eustat.