La comida no se tira

Encuesta Agentes de la cadena de valor agroalimentaria reflexionan sobre cómo disminuir el despilfarro alimentario

Recientemente se presentó el Manifiesto ‘No al Despilfarro Alimentario en Euskadi’, una iniciativa impulsada por la Viceconsejería de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno vasco, a través de Elika Fundazioa, en el marco del Plan de Gastronomía y Alimentación. Esta iniciativa cuenta con la colaboración de más de 60 entidades e instituciones públicas y privadas, y agentes sectoriales que constituyen la cadena agroalimentaria vasca, y tiene como objetivo aunar esfuerzos para que en 2030 la cantidad de alimentos que desperdiciamos anualmente, unas 350.000 toneladas, descienda al menos un 50%. Ahora, se van a formar grupos de trabajo para la elaboración de un Plan Multidisciplinar de Acciones frente al Despilfarro de Alimentos en Euskadi. El director gerente de MercaBilbao, Aitor Argote; el director general de Ausolan, Yoseba Jainaga; el director gerente de Udapa, Alfonso Sáenz de Cámara, y el director general de Agua de Alzola, Patxi Casal, abordan en esta encuesta la problemática del despilfarro alimentario y cómo afrontar su disminución en la cadena de valor agroalimentaria.
A su juicio, ¿cuáles son los puntos de la cadena agroalimentaria vasca donde más se despilfarra?

Aitor Argote

No debemos señalar a nadie en concreto. El despilfarro se produce en todos los puntos de la cadena agroalimentaria, es un problema que tenemos que abordar con una visión global, tratando de concienciarnos todos los eslabones. Los datos de alimentos desaprovechados son realmente escalofriantes como para que perdamos el tiempo discutiendo sobre quién es más culpable en un mundo global que interactúa en todos los ámbitos.

Aitor Argote
Director gerente de MercaBilbao
“El despilfarro se produce en todos los puntos de la cadena agroalimentaria, es un problema que tenemos que abordar
con una visión global”

Yoseba Jainaga
Según nuestros datos, en Euskadi, tenemos un desperdicio total de 350.000 toneladas al año (160 kg/persona/año) y más del 40 % de las pérdidas de alimentos se produce en la venta minorista y en el consumo final (se tiran alimentos a pesar de ser adecuados en tiempo para su consumo humano). Recopilar información sobre el despilfarro alimentario en Euskadi e identificar sus principales causas es parte de las líneas de acción de la recién creada Plataforma de Euskadi Contra el Despilfarro Alimentario y de la cuál formamos parte.
Alfonso Sáenz de Cámara
Todos los estudios coinciden que el mayor punto de desperdicio de alimento está en nuestras casas, en el propio hogar. Compramos para que no falte de nada, comemos cada vez más fuera de casa, y luego el producto se nos pasa y va a la basura. Pero en una industria alimentaria como la nuestra, tenemos que convivir cada día con una exigencia creciente del cliente (cadenas de distribución) y de los consumidores en el aspecto estético, la apariencia de los productos, y cualquier marca o defecto hace que muchas patatas no sirvan para venderse en un lineal. Más de un 25% de la patata que produce un agricultor no va al lineal del supermercado en la mayoría de los casos por este motivo. A pesar de esto, puedo decir que en Udapa no tiramos nada a la basura, que estamos en despilfarro cero alimentario. Aprovechamos más del 99% de la patata, y el 1% final lo destinamos a alimentación animal, por lo que no tiramos nada a la basura.

Patxi Casal

En general el despilfarro creo que se produce en toda la cadena agroalimentaria, desde la sobreproducción inicial, -con fines de no faltar el abastecimineto de las grandes cadenas-, pasando por las propia distribución, hasta llegar al usuario final, tanto de hostelería o restauración, como cualquier otra venta al por menor. No hay un punto de la cadena que no tenga un despilafarro significativo y con posibilidades de mejora.
En concreto, desde su sector o ámbito de actividad, ¿qué se puede hacer para frenar el desperdicio alimentario?

Yoseba Jainaga
Director general de Ausolan
“Tenemos que tener en cuenta toda la cadena de valor pero, sobre todo, sensibilizando
a los consumidores finales”

Aitor Argote
En MercaBilbao ya venimos trabajando en cuatro frentes desde hace años, si no para evitar el desaprovechamiento en sentido estricto, sí para alargar el uso de esos alimentos, evitando que se conviertan en un residuo, que implica, además, importantes costes de gestión. Además, colaboramos como banco de pruebas con centros de investigación como Azti-Tecnalia en proyectos relacionados con el aprovechamiento alimentario. La primera de estas vías de actuación es la entrega de productos aptos para el consumo al Banco de Alimentos para que, a su vez, lo redistribuya entre los colectivos más necesitados. Estos productos salen de la cadena de comercialización, bien por plazo o por presencia, pero finalmente acaban siendo aprovechados en el consumo. Los productos que no alcanzan siquiera a llegar a los beneficiarios del Banco de Alimentos, suelen ser retirados por los titulares de explotaciones ganaderas, los baserritarras, para alimentación de sus animales. Y tras las dos cribas anteriores, los sobrantes, se retiran separadamente para la elaboración de compost, que a su vez se utiliza como abono. Adicionalmente, y como cuarta vía de actuación, los residuos que surgen de la limpieza y preparación de pescado, son retirados por una empresa que los utiliza para la elaboración de harinas, asimismo, para alimentación animal.
Yoseba Jainaga
Entender que se trata de una lucha a favor del desarrollo sostenible. Tenemos que tener en cuenta toda la cadena de valor, desde el ajuste de formatos en la compra de materias primas, optimizando los insumos en las necesidades productivas, definiendo flujos de reutilización en el propio proceso de producción, etc.; pero sobre todo, sensibilizando a los consumidores finales; por ejemplo, en los comedores donde tenemos activa la campaña ‘La comida no se tira’, hemos conseguido reducir el desperdicio alimentario en un 13%.

Alfonso Sáenz de Cámara
Director gerente de Udapa
“Promover un consumo responsable, ético,
es básico: volvamos
a la dieta mediterránea, a consumir ‘5 al día”

Alfonso Sáenz de Cámara
Yo me crié en una casa de agricultores en la que mi madre y mi abuela aprovechaban todo. Lo que sobraba se aprovechaba en la siguiente ingesta o bien se hacia otro plato con ello. Tirar la comida era lo último. Así que creo que lo más fácil y efectivo que podemos hacer entre todos los que hemos vivido esto es recordarlo, practicarlo, y educar a nuestros hijos para darle esa importancia que tenía la comida antiguamente. Nuestro cliente es la distribución alimentaria organizada. Desde nuestra posición, debemos y podemos ayudar a nuestros clientes a reducir la caída de producto que se da en los lineales.

Patxi Casal
En primer lugar, lo que habría que hacer es recoger datos sobre el despilfarro de una forma eficiente y objetiva en nuestro entorno. Sabemos que el agua es el alimento que más se despilfarra en el País Vasco, y además es posible que en el medio plazo sea un bien muy escaso, por su facilidad para contaminarse de forma irreversible. Creo que habría que tomar conciencia real, de forma urgente, sobre la problemática del agua y, de forma decidida, acometer las inversiones que permitan asegurar el abastecimiento de agua de consumo humano en el medio y largo plazo, aunque dichas actuaciones puedan parecer contrarias al manteniento de ciertas estructuras industriales que en la actualidad tienen importancia en nuestro sistema de bienestar, pero que realmente marcan tendencias cortoplacistas y en muchas ocasiones sin posibilidad de retorno para el medio ambiente.
¿Es mejor prevenir, hacer una producción y consumo responsable o enviar a los bancos de alimentos y comedores sociales ese sobrante?

Aitor Argote
En mi opinión no es algo excluyente. Hay que prevenir a la vez de producir con responsabilidad y consumir con conciencia. Y a partir de ahí, los excedentes que puedan surgir enviarlos a los Bancos de Alimentos y comedores sociales. Es una estrategia global de la que se deben liberar recursos y producto para atender las necesidades sociales globales.

Patxi Casal
Director general de Agua de Alzola

“Habría que tomar conciencia real, de forma urgente, sobre la problemática del agua, porque es el alimento que más se desperdicia en el País Vasco”

Yoseba Jainaga
En la lucha contra el despilfarro, la medida prioritaria debe ser la reducción; para después poder aplicar la reutilización, la redistribución y el reciclado. Todas ellas se complementan, ya que en ocasiones no es posible ajustar a cero y por eso es interesante contar con un programa de donaciones; en Ausolan tenemos varias experiencias en este sentido que compartimos el 29 de noviembre en la jornada que organiza Elika, ‘Por la sostenibilidad de nuestro sistema alimentario: Despilfarro 0’.
Alfonso Sáenz de Cámara
Sin duda que es necesario poner a la alimentación es su lugar adecuado. Hoy estamos en un mundo global en el que los que vivimos en el primer mundo podemos estar consumiendo productos alimenticios de un país del Hemisferio Sur en el que los propios habitantes del país pasan hambre por no poder adquirir esos productos que ayer se produjeron allá. Así que promover un consumo responsable, ético, es básico: volvamos a la dieta mediterránea, a consumir ‘5 al día’ (cinco raciones de frutas y hortalizas frescas diarias), acostumbrémonos a consumir productos naturales, frescos en su mayoría, mínimamente elaborados, sabrosos porque buscamos producto de temporada y de proximidad, y esto cambiará. Los consumidores tenemos la palanca del cambio.
Patxi Casal
No debería darse esta interrelación entre la producción/consumo y bancos de alimentos/comedores sociales. Cada realidad debería de ser estudiada de forma singular y dotar de soluciones en cada caso independientes, que aseguren la correcta respuesta social a ambos planteamientos de forma satisfactoria.
Estrategia Empresarial

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