España es el mayor importador de GNL de Europa, su gran apuesta

Gas natural Representa el 4,4% de la demanda global, hasta las 15,72 millones de toneladas, con un incremento del 46%

Bahía Bizkaia Gas (BBG) es habitualmente una de las plantas que más gas aportan al sistema gasista español.

España destaca entre los países europeos como el mayor importador de gas natural licuado (GNL) de Europa y el sexto país que más GNL compra en el mundo. Tan sólo le superan algunos países como Japón, China, Corea del Sur, India y Taiwán. Destacan como grandes ‘compradores’ compañías como Iberdrola, Endesa, Cepsa Gas, Unión Fenosa Gas, Naturgas y Naturgy.

El gas natural licuado (GNL) sigue ganando protagonismo en los mercados y todo indica que es una tendencia que se mantendrá en los próximos años según los datos del informe anual 2020 del International Group of Liquefied Natural Gas Importers (GIIGNL), correspondiente a 2019. Concretamente, la capacidad total de regasificación en el mundo es de 920 millones de toneladas al año (MTPA) mientras que la capacidad total de licuefacción se queda en las 427 MTPA.
Europa destaca como uno de los grandes importadores de GNL a nivel mundial y, entre todos los países, España va en cabeza como el mayor importador de GNL y el sexto país en el ranking mundial. Tan sólo le superan países como Japón, China, Corea del Sur, India y Taiwán.
Concretamente, España importó 15,72 MT de GNL en 2019 (el 4,4% de la demanda global) procedente, principalmente, de Qatar (3,21 MT), seguido de Nigeria (3,14 MT), EE.UU. con 3,12 MT, Rusia (2,26 MT) y Trinidad y Tobago (2,06 MT), aunque también obtiene GNL de Argelia, Angola, Camerún, Guinea Ecuatorial, Noruega y Perú.
En cuanto a los grandes ‘compradores’ españoles destaca Naturgy, con grandes contratos de GNL con diferentes países, además de vender parte de ese GNL a otras empresas, así como Iberdrola, Endesa, Cepsa Gas, Unión Fenosa Gas y Naturgas.
Menor impacto El gas natural se le considera una fuente energética de transición en la descarbonización. Es el combustible fósil más puro y limpio, lo que se traduce en un menor impacto ambiental. Además, permite cumplir la regulación de la Organización Marítima Internacional (OMI) que limita el contenido de azufre en combustible al 0,5% desde enero de 2020 y avanzar hacia la consecución de los objetivos de emisiones de la OMI, que fijan una reducción del 40% de CO2 en 2030 y del 70% en 2050 en el transporte marítimo.
En esta radiografía destaca a planta regasificadora del Puerto de Bilbao, Bahía Bizkaia Gas (BBG). Es una de las plantas que más gas aporta al sistema gasista español. Así, en 2019 (últimos datos oficiales) inyectó el 27,5% del total de GNL. La instalación recibió ese año un total de 67 buques, que movieron 9,63 millones de metros cúbicos de GNL, equivalentes a 4,2 millones de toneladas, lo que representó el 12% del movimiento total del Puerto de Bilbao.

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