Fue aprobado por unanimidad por el Parlamento Vasco en la anterior legislatura y a falta de dos años para completar la presente, ya se han cumplido más del 90% de las acciones y de los objetivos establecidos en el Plan Vasco de Salud 2013-2020, la piedra angular sobre la que pivotan las políticas del Departamento de Salud del Gobierno vasco.

En el último informe de seguimiento del Plan de Salud , donde se establecían 146 acciones y 35 objetivos, se constata que ya se han implantado o iniciado nueve de cada 10 objetivos y acciones que en él se fijaban para, en palabras del lehendakari Urkullu, “mantener y mejorar nuestro sistema sanitario como público, universal y de calidad para, desde la equidad, poder seguir obteniendo buenos resultados en salud con los máximos niveles de efectividad y eficiencia, reforzando la confianza de las personas en su sistema sanitario”.
Entre los principales avances que destaca el informe, figuran los referidos a programas de cribado de cáncer de mama y colon, el despliegue del 'Plan de Cuidados Paliativos', la mejora experimentada en el control de las enfermedades crónicas, o el incremento del uso del 'consejo sanitario' de Osakidetza
‘Osasuna: pertsonen eskubidea, guztion ardura’ es el lema con el que se bautizó el Plan, en un ejercicio para reflejar con nitidez el propio proceso de elaboración que siguió. Una dinámica abierta a las aportaciones y con protagonismo de personal técnico y experto de áreas sanitarias. Con este lema también se quiso expresar que la salud es un valor fundamental que constituye ante todo un derecho humano pero que, sin embargo, no está exento de responsabilidades.
Cinco áreas prioritarias Las 146 acciones específicas que se establecieron en el Plan de Salud, y cuyo objetivo es el de mejorar la salud de las personas tanto en resultados como en eficiencia y equidad, se engloban en cinco áreas prioritarias, dos transversales: Equidad y responsabilidad y entornos y conductas saludables; y tres que se refieren a colectivos y grupos poblacionales específicos: personas con enfermedad, envejecimiento saludable y salud infantil.

En el área de Equidad y responsabilidad se fijó como meta reducir las desigualdades sociales y de género en salud en la población vasca, mejorando la situación de los grupos mas desfavorecidos. Por ejemplo, los más de 6,6 millones de euros que se destinarán este año a garantizar la adherencia a los tratamientos farmacéuticos a aquellas personas que, por su situación de vulnerabilidad, no podrían hacer frente al coste añadido impuesto por el copago farmacéutico.
En el capítulo de Entornos y conductas saludables se puso como objetivo impulsar la promoción de la salud, los entornos y los estilos de vida saludables mediante la colaboración intersectorial en los ámbitos local y comunitario. Así, se han realizado iniciativas de promoción de la actividad física, como Mugibili, Mugikasi, Red de Ciudades que Caminan, o el Programa Aula Joven, entre otros.
En el área específica de Personas con enfermedad se estableció intervenir sobre las personas que las padecieran para disminuir la morbilidad y la discapacidad que conllevan. Destaca el sustancial incremento de consultas telefónicas, consultas no presenciales, citas a través de la web, telemonitorización y consejo sanitario.
La promoción del envejecimiento saludable está siendo el objetivo central de este ámbito específico. Así se está avanzando en la implantación de la Historia Clínica (Osabide Global) en las residencias de mayores.
Finalmente, el macroobjetivo del área Salud infantil y juvenil no está siendo otro que el de desarrollar políticas para mejorar las capacidades de niños y jóvenes de Euskadi de vivir saludablemente para minimizar los riesgos de las conductas no saludables y para mejorar las oportunidades sociales y afectivas. Entre los múltiples programas educativos y de formación desarrollados, destaca el Programa de Asistencia Dental Infantil, PADI, que llega ya a siete de cada 10 menores.
Implantación y seguimiento La evaluación, el seguimiento y la rendición de cuentas del Plan de Salud se llevan a cabo anualmente por una Comisión Directora, presidida por el lehendakari, que en su último informe ya ha empezado a abordar los objetivos para los próximos años.
En este sentido se ha informado de la consolidación de los programas de promoción de la actividad física, la puesta en marcha de las
'Iniciativas de Alimentación Saludable', o la continuidad de los programas 'Clases sin Humo' y 'Menores y Alcohol'. Por otra parte, se ha logrado que el acceso a la historia clínica en residencias de personas mayores crezca hasta alcanzar el 82% de las plazas disponibles.
De cara al 2020 la Comisión del Plan de Salud ha mostrado su compromiso de seguir profundizando en ámbitos como el fortalecimiento de la Atención Primaria, el fomento de las redes de salud en el ámbito local y comunitario, el empoderamiento y participación de la ciudadanía, o la acción intersectorial en salud, así como iniciar los trabajos de un nuevo Plan de Salud que aborde los retos del futuro a partir de 2021.