Consultoría de innovación para averiguar qué tipo de empresa queremos ser mañana

La tutorización presencial de la innovación en la organización y un posterior diseño de una herramienta de gestión configuran dos elementos que permiten desarrollar ventajas competitivas para afrontar las necesidades empresariales del mañana

La consultoría de innovación evalúa aquellos proyectos que puedan suponer ventajas competitivas y que sean viables según los criterios fijados previamente para su posterior tutorización presencial.

La innovación cobra peso dentro de los planes de los principales consultores de empresas Una óptima consultoría de innovación da respuesta a los dos ciclos principales que se dan dentro del núcleo empresarial, el operacional y el innovador, y ayuda a averiguar “qué tipo de empresa queremos ser el día de mañana”.

Para entender en qué puede ayudar una consultoría de innovación, los expertos distinguen los dos ciclos que se dan dentro del núcleo empresarial: el ciclo operacional y el ciclo innovador.
El ciclo operacional, que sería el tiempo que una empresa tarda en cumplir con el proceso completo de producción y venta de un servicio. En cierta forma, representa el presente de la empresa. A través de este proceso, las organizaciones obtienen resultados de manera inmediata. Por su parte, el ciclo innovador define lo que se va a vender a corto, medio o largo plazo. Es un ciclo más difuso porque exige desarrollar soluciones en base a tendencias futuras y realizar una constante autocrítica del modelo empresarial. Para realizar una consultoría de innovación de manera efectiva, la pregunta clave es: ¿Qué tipo de empresa queremos ser el día de mañana?.

La consultoría de innovación intenta establecer una

metología personalizada para cada empresa

basándose en su estrategia y necesidades

Las empresas españolas, especialmente las pymes, dedican un 90% al ciclo operacional y un 10% al ciclo innovador, lo cual hace que su estrategia de crecimiento esté muy limitada por las necesidades del día a día. La consultoría de innovación trabaja con ‘ambidestreza’ organizacional ambas ramas, estableciendo las necesidades de la empresa en el día de hoy para entender cuáles serán sus necesidades en el día a día de mañana.
La consultoría de innovación entiende ésta como un concepto que se aplica sobre el carácter general de la empresa, lo que no es incompatible con las diferentes ramas empresariales en las que se aplica de manera diferenciada.

Gracias a la consultoría de innovación se permite que

el consumidor adquiera un nuevo servicio

o una modificación del anterior

Gracias a la consultoría de innovación se permite que el consumidor adquiera un nuevo servicio o una modificación del anterior. Es la más evidente de cara al consumidor, aunque también la más difícil de establecer, y en la que creatividad e innovación indudablemente van de la mano.
Tecnologías disruptivas
Las tecnologías más disruptivas, como la inteligencia artificial, el ‘machine learning’, el internet de las cosas o el ‘blockchain’ no son ya únicamente desafíos para el futuro, sino realidades tangibles para muchas empresas que necesitan incorporarlas de forma inmediata para triunfar en la era de la transformación digital.
El sector de asesoramiento de empresas se está adaptando a las nuevas necesidades del mercado condicionadas por la citada transformación digital con nuevos servicios, productos y, sobre todo, acompañamiento especializado, incluida la búsqueda de los mejores partners tecnológicos y los programas de ayudas más idóneos para cada proyecto empresarial. Actualmente existen múltiples programas de financiación pública a nivel autonómico, estatal y europeo, con procedimientos y prioridades diferentes que se basan en objetivos político-económicos. Debido a que el nivel de solicitudes se ha visto incrementado en los últimos años, los requisitos para la obtención de financiación son cada vez más estrictos y la consultoría en innovación ayuda a superarlos.

90% es el porcentaje que dedican las pymes al

ciclo operacional en consultoría de innovación.

10% es el resto que se dedica al
ciclo innovador.

No todos los proyectos que se plantean en una empresa a través de las ideas que se generan interna o externamente son viables, ya sean técnica, económica o financieramente. Por ello, disponer de una metodología de evaluación que tenga en cuenta determinados criterios aporta a la empresa una potente herramienta de gestión. Para saber qué proyectos deben implementar las organizaciones y cuáles no, y en caso de haber detectado varios, cuáles hay que priorizar, es necesario establecer dos clasificaciones en base a determinados criterios que sirvan para ordenar y seleccionar dichos proyectos. La consultoría de innovación intenta establecer una metodología personalizada para cada empresa basándose en su estrategia y necesidades, y evaluando aquellos proyectos que puedan suponer ventajas competitivas y sean viables según los criterios mencionados. Este servicio, que ofrecen varias empresas del sector, se suele desarrollar a través de tutorización presencial de la innovación en la organización y un posterior diseño de una herramienta de gestión.
Otro reto sensible de la consultoría de Innovación es la gestión de proyectos que, según la norma ISO 10006, es la rama de la ciencia de la administración que trata la planificación y el control de proyectos. En estos casos se impone un servicio de externalización de la gestión y dirección de proyectos de I+D+i para ayudar a la empresa a ser más eficientes.

Profesionales con experiencia y servicios de alto valor añadido

Euskadi cuenta con un buen número de firmas de consultoría especializadas en innovación con dilatada experiencia, equipos profesionales, una amplia oferta de servicios de alto valor añadido y, sobre todo, un firme compromiso con los procesos innovadores internos. Entre estas compañías se encuentran firmas como Bantec, Zabala, Carsa, OPE Consultores u Oteic.
Con más de 5.000 proyectos gestionados en sus 10 años de vida, Bantec está potenciando su actividad de I+D+i como factor diferencial de competitividad de las empresas, incluyendo la asistencia a sus clientes en el establecimiento de contactos con laboratorios y centros tecnológicos para el desarrollo conjunto de proyectos. Para Zabala Innovation Consulting, “la digital es la nueva revolución industrial, que está cambiando los paradigmas de mercado, operación, cliente y competencia a una velocidad exponencial”. Bajo esta premisa, la firma es experta en financiación de la I+D+i, incluida la búsqueda de ayudas públicas y subvenciones para proyectos innovadores de empresas, organismos de investigación y administraciones públicas. En este mismo sentido, el grupo Oteic, que ha superado el medio siglo de vida, participa en iniciativas como Keiretsu Forum , una plataforma que permite a startups innovadoras lograr financiación de hasta 500.000 euros a través de una amplia red internacional que cuenta con más de 2.500 inversores activos en 52 sedes a nivel mundial.
Por su parte, la consultora Carsa, integrada en el grupo Innovalia, consigue mejorar, mediante la gestión integral y profesional de la I+D+i, el posicionamiento de la empresa de forma interna y externa, a partir de la aplicación de nuevas tecnologías, proyectos innovadores y acciones de internacionalización. Otro ejemplo en este sector es OPE Consultores, que ofrece asesoramiento para acelerar el time-to-market (innovación abierta, marketing expedicionario, prototipado rápido,…), así como soluciones de neuroimarketing, en colaboración con la consultora vizcaína Banpro-Obeto, para reducir el índice de fracaso en el lanzamiento de nuevos productos o servicios.

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