GUÍA DE LA INNOVACIÓN EN EL PAÍS VASCO 2023 “Cómo alcanzar la cumbre de la innovación”

Javier Mata, director general de Bultz-Lan

Javier Mata, director general de Bultz-Lan. Foto: Bultz-Lan

Euskadi es territorio con gran afición a la montaña y, también, con trayectoria en la innovación. 

Bien es verdad, que si hablamos de montaña podemos diferenciar entre senderismo, alpinismo, etc. y si hablamos de innovación, también tendremos diferentes niveles y, en ambos casos, sucede, en muchas ocasiones, que cuando se alcanza una cima hay que pensar en llegar a la siguiente, ya que siempre hay que buscar el próximo reto para mejorar la competitividad de las empresas.

Preparar la innovación en la empresa se asimila a una expedición de montaña en muchas circunstancias, ya que no es un camino sencillo, ni se recorre tan rápido como nos gustaría.

Para empezar, hay que planificar y prepararse para ejecutarla. No es flor de un día estar capacitado para alcanzar ciertas cumbres, ni tampoco lo es convertirse en una empresa innovadora.

De hecho, ya sobre el terreno, al comenzar la expedición es fundamental la aclimatación al terreno, que, siguiendo con el símil, podríamos comparar en la empresa con la preparación de nuestros equipos, las dinámicas que se generan, las tecnologías disponibles… Podemos tener muy buenas intenciones en la mayoría de las ocasiones, sí, pero como responsables de las empresas estamos obligados, además, a poner los medios técnicos, humanos y de cualquier otra índole necesarios, por ejemplo, víveres suficientes cuando se trata de una expedición, para realizar el camino y llegar a cumplir los objetivos con éxito y sin asumir riesgos extremos.
En el camino de la innovación siempre tenemos una meta. La cumbre de la innovación podríamos llamarla, pero en multitud de ocasiones surgen diferentes problemáticas que dificultan ese recorrido. Por ello, es fundamental asentar los avances del proceso, tener un campamento base, al que poder retroceder para reflexionar sobre si los pasos dados han sido correctos, sobre cómo se pueden solucionar los problemas surgidos y, fundamentalmente, cómo se puede abordar el camino a la cumbre de nuevo con éxito, y poder trasladarlo a los procesos de la empresa y, por lo tanto, a los resultados: bien por eficiencia en la gestión interna, en la mejora en los servicios o productos que se ofrecen al cliente, nuevos desarrollos, etc.
Una vez iniciado este recorrido no hay que tener miedo a salirse de la hoja de ruta, porque las condiciones a veces cambian y, lo fundamental, es avanzar sin perder de vista el objetivo, adaptándonos a las circunstancias.

En Euskadi somos territorio de montaña y también, de innovación, con grandes referentes en cada ámbito”

En la empresa debemos afrontar la innovación como los grandes montañeros. Una vez alcanzada la cumbre, descender y abordar el siguiente reto. Hoy en día resulta básico abordarla de esta manera, ya resulta habitual que haya que innovar continuamente. Estamos en un mundo que avanza a mayor velocidad y no espera. Adaptarse a los cambios en los mercados, comportamiento de la clientela, etc., es vital para seguir siendo competitivos.

En Euskadi, como mencionaba al principio, somos territorio de montaña y también, de innovación, con grandes referentes en cada ámbito. A veces somos tremendamente autoexigentes, otras, relativamente autocomplacientes. Somos reconocidos internacionalmente en los dos campos y, además, hay muchas similitudes en los elementos previos que hay que plantearse al decidirse a emprender cada una de estas actividades. 

En el mundo de la empresa debemos tomar como referentes en el mundo de la innovación a quienes mejor lo están haciendo, pero sin olvidarnos de cuál es nuestra situación de partida, el tamaño, los equipos o los medios con lo que contamos. A la mayoría de nosotros no se nos ocurriría subir determinadas montañas, aunque sí practiquemos habitualmente senderismo o, de vez en cuando, alcancemos alguna cota más alta.

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