2024 fue un año con luces y sombras para la familia Eusko Label. Si bien la consolidación a la baja de los precios de producción (energía o fertilizantes), especialmente agradecida por la ganadería, trajo estabilidad, los incidentes meteorológicos convirtieron el año en mejorable para los productos de origen vegetal. El txakoli, las legumbres o los productos de la huerta vieron reducidas sus cosechas. En lo referente a los productos de la pesca, salvaron los muebles con precios aceptables en la lonja pese a, como en el caso del bonito, no completar las cuotas. Cambian los hábitos Los hábitos de la sociedad, asimismo, restando importancia a la
“Hemos trabajado incansablemente para posicionar al sector alimentario vasco donde se merece, a la vanguardia en innovación, calidad y saber hacer empresarial”. Con esta orgullosa aseveración, Manu Giner, presidente del Basque Food Cluster, inauguró la celebración del Cluster Eguna 2024 en el que la asociación celebró su quince aniversario. Tres lustros en los que el crecimiento experimentado por el clúster referente en la cadena de valor alimentaria vasca ha sido notable, tanto en términos cuantitativos como cualitativos. Lejos quedan los orígenes, en 2009, de lo que se denominó Clúster de Alimentación de Euskadi -Basque Food Cluster desde 2