Unceta, de Elgóibar, decidió implantarse en Cuba en 1995 tras un periodo de cinco años de ventas regulares a empresas de aquel país, con la intención de aumentar su incidencia en el sector de distribución de herramienta industrial y acercar el producto al cliente. Tras obtener la licencia de la Cámara de Comercio local, abrió oficina y almacén en Zona Franca. 20 años después, “a pesar de que la competencia es fuerte y cada vez mayor, somos un referente en Cuba en el suministro industrial y la única empresa implantada en la isla con un catálogo propio, del que hemos repartido miles de ejemplares en todos estos años”, afirma Ernesto Arberas,