El Observatorio de Coyuntura Industrial es un buen termómetro de la situación de la industria vasca. Los 17 clústeres y asociaciones vascas ofrecen unas perspectivas bastante reales y acertadas de lo que nos puede deparar el futuro cercano. Y para la mayoría, las cosas pintan bien. Desafiando a los anuncios, previsiones o avisos de desaceleración por las incertidumbres internacionales, 10 de ellos esperan mejorar su actividad durante los próximos seis meses en facturación, pedidos, empleo, exportaciones y uso de la I+D+i. Y de ellos, los más optimistas son la alimentación, la automoción y la biosalud. No es baladí que el 100% de sus empresas prevean mejorar sus datos en estos aspectos, a pesar de incertidumbres como el caso del diésel, los aranceles, etc. Solo el sector papelero constata un descenso de la facturación, de los pedidos y de las exportaciones en los últimos seis meses y prevé que continúe esta situación. Puede ser cierto que haya algo de inercia que haga que nuestra industria pueda aprovechar unos meses más el viento de cola que ha tenido en los últimos años. Pero las empresas no suelen avanzar pronósticos a humo de pajas. De todas formas, para poner en contexto estas previsiones hay que tener en cuenta otros ‘termómetros’, como el que elabora el Departamento de Hacienda y Economía, que aún situándonos en febrero en parámetros de crecimiento sólido, baja dos puntos con respecto a enero.