La mayoría de socios y socias de Ulma y Orona han decidido afrontar el futuro de forma independiente y abandonar Mondragon, que ahora inicia una nueva etapa.

Los socios de los grupos cooperativistas Ulma y Orona aprobaron en sus respectivas asambleas extra- ordinarias su salida de la Corporación Mondragon, que suponían el 15% del total de sus ventas industriales. Entre ambas suman casi 2.000 millones en ventas y más de 11.000 empleados, y representaban dos de las empresas más importantes de la división industrial del grupo.
Al respecto, Lander Diaz de Gereñu, presidente del grupo Ulma, manifestó que “los órganos de las cooperativas de Ulma hemos recibido un mandato claro -por parte de las personas socias-. Somos parte del éxito que representa el modelo cooperativo vasco y vamos a defender siempre sus valores”. En cuanto a su relación con Mondragon, aseguró que Ulma seguirá trabajando “de la mano en todas las acciones que beneficien al modelo que representamos todos”.
Mondragon, por su parte, reafirmó el “respeto absoluto” a las firmas que comienzan una nueva etapa de forma independiente y deseó que ambas “evolucionen en positivo de cara al futuro”. Asimismo, señaló que ahora afronta “el nuevo horizonte” poniendo el acento “en los valores de intercooperación y solidaridad, señas de identidad que han permitido que sus cooperativas”

Orona y Ulma suman casi 2.000 millones en ventas y más de 11.000 empleados

Asimismo, Mondragon trasladó un mensaje “en clave de ilusión”, soportado en la evolución positiva de sus negocios, en los proyectos de futuro que se están abordando en la actualidad y “en la confianza de que el modelo cooperativo es el adecuado para enfrentar los desafíos de los mercados y para construir sociedades más cohesionadas y sostenibles”.

Respeto institucional
También se pronunció al respecto la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, quien se mostró convencida de que “la actividad cooperativa seguirá siendo fuerte” en Euskadi, en el marco de una “nueva realidad organizativa económica e industrial”.
Tapia aseguró que “la Corporación seguirá siendo un grupo relevante y Ulma y Orona continuarán con esos valores de cooperativismo, solidaridad y trabajo conjunto”. En este sentido, incidió en que el Ejecutivo continuará colaborando y trabajando “para tener un ámbito industrial fuerte porque es nuestra columna vertebral, lo que hace que tengamos una sociedad equilibrada”. Respecto a Mondragon, asumió que “será un poco más reducido pero continúa siendo fuerte, tiene empresas competitivas y que funcionan en el ámbito internacional”, un modelo “conocido y reconocido en el mundo”.
Por su parte, el diputado de Promoción Económica, Turismo y Medio Rural de Gipuzkoa, Jabier Larrañaga, deseó tanto a las dos cooperativas como a Mondragon “la mejor de las suertes en esta nueva etapa”, ya que “son agentes clave para nuestro desarrollo económico y social”. Añadió que los valores del coopearativismo “son los valores del territorio; el verdadero desafío es mantenerlos vivos para que sigamos teniendo empresas competitivas globalmente”.