Los constructores alaveses alertan sobre la falta de profesionales

Más de la tercera parte de los trabajadores que conforman el sector de la construcción superan los 50 años. Foto: Archivo

SEA Uneca, la patronal de los constructores alaveses  ha expuesto durante su Asamblea General las principales preocupaciones del sector y que más inquietan a sus representantes, entre las que se encuentran las dificultades para contratar nuevos trabajadores que den relevo a las envejecidas plantillas actuales -más de la tercera parte supera los 50 años-, el incremento en el precio de las materias primas y la reducción de los márgenes.
Según los responsables de Uneca, se trata de preocupaciones que se mantienen inalterables en los últimos años ante la ausencia de cambios significativos que impulsen una mejora patente para las 2.439 empresas -en torno a un 4,5% menos que el pasado ejercicio- que emplean a 6.945 trabajadores en el Territorio Histórico de Álava. 
Añaden que, hacer frente a todos estos obstáculos conlleva una dificultad mayor para acometer todo tipo de actuaciones relacionadas con las necesarias inversiones en formación, I+D+i, medio ambiente, seguridad, digitalización, industrialización y cumplimientos regulatorios cada vez más exigentes, para un sector en el que más del 95% de sus empresas tienen menos de 10 trabajadores.
Ante este escenario, la Asamblea ha planteado una actuación coordinada entre las Administraciones Públicas, las empresas y el resto de las partes interesadas (centros de formación, organizaciones sindicales, etc.), tanto en el diagnóstico como en la búsqueda de soluciones a un problema claramente sectorial y, a la vez industrial, pero no financiero como en el pasado. Esta fórmula va a ser trasladada al recién formado Gobierno vasco desde las asociaciones empresariales.
Por otro lado, desde SEA Uneca insisten en que la reducción de viviendas en oferta, tanto en venta como en alquiler, como consecuencia de la escasa producción de obra nueva (libre y VPO), junto al incremento actual de la demanda, va a repercutir en un incremento de su precio a corto plazo en el caso de las viviendas libres nuevas y de segunda mano.

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