Las 16 organizaciones clúster de Euskadi, reunidas en el Observatorio de Coyuntura Industrial (OCI), han mostrado unas perspectivas positivas para la primera parte de 2024, con una previsión general a mantener o mejorar ligeramente su actividad. El encuentro, de carácter semestral, analiza los principales indicadores de la industria vasca en materia de pedidos, facturación, exportación, empleo e inversión en I+D+i.
Además de los responsables del Gobierno vasco, en la reunión estuvieron presentes miembros de los 16 clústeres de Euskadi: transportes, movilidad y logística; aeronáutica; fundición y forja; automoción; energía; biosalud; construcción; TEIC y conocimiento; equipos ferroviarios; hábitat, madera, oficina y contract; alimentación; industrias marítimas; tecnologías avanzadas de fabricación; medio ambiente; papel; y productos e instalaciones siderúrgicas.
Respecto a la cartera de pedidos, los presentes consideraron que va a mejorar ligeramente. Así, nueve de los clústeres prevé que va a crecer, uno retroceder, y el resto espera que se mantenga. El siguiente de los apartados valorados es el de las inversiones, que consideran que se han reactivado y observan también un restablecimiento de la demanda.

Existe una preocupación generalizada por la dificultad de encontrar personal cualificado y perfiles tecnológicos

En cuanto a la facturación, las perspectivas siguen en la misma línea, con previsión de crecimientos por parte de ocho clústeres; siete apuntan a un mantenimiento, y solo uno prevé una reducción.
La tendencia es favorable, a su vez, en cuanto a las exportaciones, en la misma senda positiva, con ocho clústeres que prevén mantener, siete mejorar su comercio exterior en el próximo semestre, y solo uno estima que descenderá.
Tras un 2023 en general positivo, las expectativas apuntan a una mejora o estabilidad, a pesar de posibles desafíos geopolíticos o económicos (conflicto en Ucrania, Gaza, Golfo Pérsico). Añadir también que en estos momentos, el tipo de cambio euro-dólar resulta beneficioso.
Otra referencia a valorar por los responsables de las organizaciones es el empleo, con unas previsiones que continúan en ascenso. Ninguno de los 16 clústeres espera empeorar en este terreno, aunque hay una preocupación generalizada en cuanto a la ‘cantera de talento’, por la dificultad para encontrar personal cualificado y perfiles tecnológicos.
Innovación y desarrollo
Por último, la I+D+i también seguirá al alza, puesto que ocho clústeres esperan crecer y otros tantos mantenerse. Ninguna de las 16 organizaciones considera reducir su inversión en investigación, desarrollo e innovación. En este apartado, los vectores que traccionan muchos de los proyectos innovadores tienen que ver con la descarbonización, la digitalización y adaptación a nuevos nichos más avanzados. También las ayudas e incentivos impulsan este capítulo.
El encuentro dejo constancia además, de la inquietud que hay en la industria -no solo en el sector de la energía- por el difícil reto de las redes eléctricas para asumir el incremento de potencia necesaria para dar respuesta a los consumos que requieren el hidrógeno, los datos, las renovables o la descarbonización.