“Invertir en mujeres emprendedoras no sólo es rentable económicamente, además reporta importantes beneficios sociales”, destacó la presidenta de la Asociación de Profesionales, Empresarias y Directivas de Gipuzkoa Aspegi, Nerea Ibañez, en la presentación del balance de 10 años del programa Emekin, impulsado por la Diputación Foral de Gipuzkoa desde 2007 con el objetivo de fomentar proyectos emprendedores creados por mujeres.
El programa busca también dejar atrás las diferencias entre hombres y mujeres, y si en 2007, había una diferencia del 6,4% en la tasa de actividad emprendedora entre hombres y mujeres, esa distancia ha ido bajando año tras año, hasta llegar al 0,2% en 2016, tal y como destacó la diputada de Promoción Económica, Ainhoa Aizpuru. Así, en la última década y a través de Emekin se ha entrevistado a 1.775 mujeres, de las cuales 1.591 han entrado en el programa; se han realizado un total de 1.167 planes de viabilidad, que finalmente se han plasmado en la creación de 849 empresas, el 55,59% dedicadas al sector servicios, el 35,55% al comercio y el 8,86% a la hostelería.

“Aunque los datos demuestren mejoría, queda mucho por hacer”, comentó Ainhoa Aizpuru. De hecho, aún cuando el nivel de emprendimiento en Gipuzkoa es más alto que la media de la CAV, desde 2007 ha bajado considerablemente, siendo el punto de inflexión en 2014, cuando comenzó a subir, hasta colocarse hoy en día en el 3,8% entre los hombres y en 3,6% entre las mujeres. “Estamos desarrollando nuevos instrumentos y oportunidades de financiación, nuevas medidas para mejorar la viabilidad de los proyectos y procesos de homologación que aumenten la presencia de estos proyectos en el territorio”, anunció Aizpuru.