Los expertos apuestan por incorporar los datos corporativos y su explotación dentro de la estrategia de digitalización de las empresas. El modelo de empresa digitalizada, que utiliza los datos, incrementa su competitividad y optimiza el proceso de toma de decisiones.

Euskaltel organizó recientemente un encuentro virtual sobre ‘Gobierno y explotación de los datos corporativos’, el primero de un miniciclo de talleres prácticos, que continuará este mes, para ahondar en el proceso de digitalización de las compañías. Más de 80 profesionales y responsables de empresa pudieron conocer las nuevas arquitecturas que en la actualidad permiten combinar los datos, almacenarlos adecuadamente para su explotación y disponer de las herramientas de gobierno necesarias para mejorar, gestionar y garantizar la calidad y el correcto aprovechamiento de toda esa información corporativa.
Alberto Díaz, responsable de Alianzas, IoT y Transformación Digital para empresas del Grupo Euskaltel, y Alberto Rezola, responsable de explotación del dato y socio de la empresa Datu(a) destacaron la necesidad de hacer una apuesta clara por los datos y su explotación, dentro de la estrategia de digitalización de las empresas.
El taller fue una aproximación didáctica y práctica a los fundamentos para convertir las organizaciones en empresas ‘data driven’, aquellas que han adaptado su cultura empresarial a un entorno digitalizado y utilizan los datos para mejorar su funcionamiento. Este modelo de empresa digitalizada consigue, en primer término, aumentar su competitividad y optimizar el proceso de toma de decisiones. Y para ello es necesario reorganizar los recursos tecnológicos de cara a lograr que sean realmente efectivos. En este tipo de empresas, el empleo eficiente de los datos es el eje de todos sus procesos de trabajo y toma de decisiones. La información se convierte en su principal activo de valor y gestionarla eficazmente es misión prioritaria.

Tres fases En este sentido, destacaron que el proceso de gestión de los datos pasa necesariamente por tres fases diferentes: adquisición de cualquier tipo de dato en tiempo real o por ‘lotes’ o ‘silos’ (batch) integrados, automatizados y optimizados; preparación y almacenamiento, que implica extraer, cargar y transformar los datos e integrarlos y almacenarlos en los sistemas a corto y largo plazo, de manera que queden preparados para su explotación posterior;?y por último, gobierno del dato, mediante herramientas para administrar, mejorar y garantizar la calidad de los datos para su correcto aprovechamiento o explotación.
Alberto Díaz incidió en la importancia de que las empresas desarrollen nuevas estrategias en torno al dato y con respecto a la gestión de grandes cantidades de datos en continuo crecimiento dentro de las corporaciones, explicó que se requiere “la adopción de plataformas y tecnologías como IoT, ‘big data’ o ‘machine learning’ y disponer de conocimiento y personal altamente cualificado”.
Alberto Rezola, por su parte, se detuvo en la importancia de disponer de los datos en las condiciones adecuadas. “Los datos son el nuevo petróleo, un activo fundamental para las organizaciones que precisan de una ‘refinería’ para controlarlos y explotarlos óptima y eficientemente. Y los resultados de esa explotación van a depender directamente de la calidad y veracidad de los propios datos”, afirmó.