La Diputación Foral de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Irun avanzan de forma conjunta hacia la ejecución del enlace completo Arbes-Oinaurre

Ambas instituciones han firmado el convenio para la redacción del proyecto, que se desarrollará a lo largo del próximo año y permitirá fijar el inicio de las obras a finales de 2027

La diputada general, Eider Mendoza, y la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, presentando el convenio de redacción del proyecto de conexión completa Arbes-Oinaurre. Foto: DFG

La diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, y la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, han participado en la firma del convenio que permitirá iniciar la redacción del proyecto constructivo del enlace completo Arbes–Oinaurre en la autopista AP-8 y su conexión con la ciudad. La firma supone un nuevo paso de cara a uno de los grandes hitos del plan integral de actuaciones impulsado por la Diputación Foral de Gipuzkoa junto con los Ayuntamientos de Irun y Hondarribia para impulsar y mejorar la movilidad en Bidasoaldea y dará respuesta a una necesidad planteada desde hace tiempo.

El proyecto contempla la creación de un nuevo semienlace en Arbes, que conectará los movimientos desde y hacia Behobia, y se conectará con el semienlace existente de Oinaurre mediante un vial de 2,1 kilómetros. Se conformará así un enlace completo que ofrecerá nuevas conexiones hacia el núcleo urbano. La previsión es que, tras la licitación que posibilita el convenio recién firmado, los trabajos de redacción del proyecto se desarrollen a lo largo de 2026, con el objetivo de iniciar las obras a finales de 2027, con un plazo de ejecución de año y medio.

Mendoza ha explicado que el nuevo enlace completo “abrirá la vía para mejoras significativas en la movilidad urbana, facilitará la distribución del tráfico y permitirá una respuesta más eficiente a los desplazamientos hacia la muga y hacia Nafarroa”. La diputada general ha subrayado que la firma del convenio "representa un avance conjunto hacia una solución viaria muy necesaria y demandada por la ciudad". “Este proyecto forma parte de una estrategia global para transformar las conexiones, mejorar la movilidad y ordenar el tráfico en uno de los entornos con mayor intensidad circulatoria de Gipuzkoa y uno de los puntos neurálgicos de nuestro país”.

La diputada general ha puesto en valor “la cooperación institucional que está haciendo posible avanzar en soluciones estructurales para toda Bidasoaldea”.

Por su parte, la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, ha subrayado que con este convenio se da "un nuevo paso fundamental para avanzar en la mejora de la movilidad urbana y la ordenación del tráfico en Irun. Y a futuro, esta culminación de la ronda sur junto con la construcción de la rotonda de Azkenportu permitirá crear el anillo viario que circunvalará la ciudad y convertirse en una alternativa real a la actual variante. No hay que olvidar que nuestra posición fronteriza conlleva que nuestras carreteras soporten un gran volumen de tráfico de paso, por lo que damos solución a una de nuestras demandas históricas".

La alcaldesa ha destacado también que los flujos de entrada y salida tendrán una mejor conexión con la ciudad con la creación de este semienlace lo que supondrá una mejora en el día a día y una nueva distribución de tráficos internos.

Nueva rotonda de Azken Portu

Ambas instituciones han aprovechado la firma del convenio, para compartir información sobre el proyecto de la nueva rotonda en Azken Portu cuya redacción última la Diputación Foral. Mendoza ha recordado que “este proyecto es una de las actuaciones recogidas dentro del plan para mejorar la movilidad en la comarca, que en su conjunto contempla una inversión estimada de 50 millones de euros e incluye actuaciones en los accesos de la N-638 y la GI-636, así como en los ámbitos de Amute, Mendelu, Plaiaundi y Azken Portu”.

Eider Mendoza ha comunicado que "una vez redactado el proyecto, es intención de la Diputación licitar la ejecución de las obras a principios de 2026. La construcción de esta rotonda permitirá todos los movimientos entre la calle Artiga y la carretera GI-636, una actuación clave para reforzar la funcionalidad y la capacidad del futuro enlace completo Arbes-Oinaurre. El proyecto, que se encuentra en su fase final y se prevé licitar a comienzos del próximo año, tiene un presupuesto estimado de un millón de euros y un plazo de ejecución de cuatro meses".

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