Después de varios años de indefinición y de cambios en la normativa legal, el Gobierno vasco aprobó el pasado verano el decreto 80/2014, de 20 de mayo, por el que se modifica la regulación de la Inspección Técnica de Edificios (ITE) en la CAPV. Este hecho supuso un espaldarazo definitivo al desarrollo de una herramienta básica para la conservación, rehabilitación y mejora del parque inmobiliario vasco, que en un porcentaje superior al 50% ya ha superado el medio siglo de vida. Además, supondrá un incremento de actividad para el sector de la construcción, uno de los que más duramente se ha visto golpeado por la crisis.
Entre las principales novedades recogidas por el decreto cabe destacar el establecimiento de un calendario definitivo para la presentación de las ITE en el registro. Así, todos aquellos edificios que hayan cumplido 50 años o más el 27 de junio de 2017, deberán presentar la ITE en su ayuntamiento antes del 27 de junio de 2018.
Se trata del primer gran hito de esta iniciativa y, por ese motivo, el Departamento de Empleo y Políticas Sociales está llevando a cabo un programa de actividades encaminadas a garantizar el correcto funcionamiento del proceso. Hay que recordar que, aunque el Gobierno vasco es el responsable de gestionar el registro único de la ITE en la CAPV, la competencia urbanística corresponde a los Ayuntamientos y son ellos los encargados de recoger la información y trasladarla al registro.

En este sentido, el Departamento ha puesto en marcha un Comité Técnico que tiene como cometido facilitar todos los aspectos relacionados con la ITE. Uno de sus objetivos principales es conseguir que los más de 77.000 edificios obligados a presentar la ITE antes de junio de 2018 lo hagan de una manera progresiva, evitando la acumulación de inspecciones en la parte final del plazo.
En estos momentos, el Comité Técnico está trabajando en la finalización del proceso de formación de todos los técnicos municipales, que serán los responsables de recibir las ITE y enviarlas al registro.
Otra de las novedades del decreto de modificación es la obligatoriedad de presentar la ITE para poder acceder a ayudas públicas a la rehabilitación, sea cual sea la edad del edificio. Esta medida va a permitir alargar la vida útil de numerosos edificios, además de generar actividad económica en el sector.

La ITE, que a todos los efectos legales es la única herramienta de aplicación en la CAPV, ha sido diseñada para garantizar la salud de los edificios residenciales a través de un examen muy específico. Se trata de una inspección visual que debe ser realizada exclusivamente por un arquitecto o un arquitecto técnico y que se centra en los cuatro puntos claves de un edificio: la cubierta, la fachada, la estructura y las redes de saneamiento. Fisuras, grietas, humedades o desprendimientos son los síntomas que determinarán la situación real del edificio. También se revisa la Eficiencia Energética y la Accesibilidad.
La ITE contempla cinco grados o calificaciones para los edificios, numerados del 1 al 5 en función de los problemas detectados y la necesidad de intervención. En los casos más graves (1, 2 y 3), será necesario presentar el certificado de subsanación después de haber realizado las obras correspondientes.
La validez de la ITE es de 10 años a partir de su presentación en la oficina municipal. A partir de junio de 2018, los edificios que vayan cumpliendo 50 años tendrán un año natural de plazo para presentar la ITE, a contar a partir de la fecha de construcción del edificio. La información básica de los edificios puede ser consultada en la página web www.euskoregite.eus