Iberdrola proveerá de 410 GWh de energía verde a Vodafone

La firma ha instalado recientemente cargadores eléctricos en la sede alavesa de Primafrío, entre otras. Foto: Iberdrola

Iberdrola y Vodafone han firmado nuevos acuerdos de compra de energía limpia (PPA) en España, Alemania y Portugal, que permitirán a la eléctrica suministrar un total de 410 GWh de energía solar al operador, equivalente a la demanda anual de electricidad de más de 117.000 hogares.
Dentro del objetivo común de ambas para reducir emisiones de CO2, Iberdrola también ha instalado ya más de 140 cargadores eléctricos en las instalaciones de Vodafone en España y les proporciona los servicios de gestión y optimización de su operación.
Aitor Moso, director global de Clientes de Iberdrola, ha señalado que “como promotores globales de energía limpia, contamos con proyectos en todo el mundo que nos permiten apoyar a empresas multinacionales como Vodafone” mediante acuerdos que “son cada vez más importantes para permitir la construcción de nuevos proyectos de energías renovables".

Electrificar el transporte
En otro orden, Iberdrola avanza en su estrategia de descarbonización del transporte pesado por carretera con diversos acuerdos recientes, como el alcanzado con Disfrimur para la instalación de más de 160 puntos de recarga para camiones eléctricos en las 15 bases de la empresa repartidas por toda España (la de Euskadi está en Gasteiz); o el cerrado con Primafrio, operador líder en logística internacional, para la electrificación del transporte pesado y la descarbonización de su actividad, que además de la instalación de puntos de recarga para camiones, contempla la posibilidad de la producción e hidrógeno con ese mismo fin.

La eléctrica alcanza un acuerdo de PPA con la británica en España, Alemania 
y Portugal 

Por último, también en las última fechas, Iberdrola renovó el ‘corazón’ de la red eléctrica de Andoain (Gipuzkoa) con la puesta en marcha de la nueva subestación transformadora de Illarramendi, totalmente digitalizada, que distribuye electricidad a 5.000 clientes. El proyecto ha durado 20 meses y ha permitido soterrar parte de las líneas eléctricas, reduciendo su impacto visual, y la infraestructura está preparada para asumir el crecimiento de la demanda previsto en la zona, así como la creciente penetración de autoconsumo.

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