El sector de la alta y media-alta tecnología aportó el 9,4% del valor añadido y generó casi 99.000 puestos de trabajo en la C.A. de Euskadi en 2022

Con respecto al total del Estado, representó el 7,8% del VAB y el 10,5% en el caso de la industria manufacturera

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El sector de la alta y media-alta tecnología (SAT) aportó, durante el año 2022, el 9,4% del valor añadido bruto total de la economía de la C.A. de Euskadi, según datos elaborados por Eustat. Este sector, que abarca aquellas actividades con una base tecnológica sólida y una rápida renovación de conocimientos, generó 98.653 puestos de trabajo, el 8,8% del total, tras crecer un 3,4%. El número de empresas donde se desarrollaron estas actividades fue de 5.032, que facturaron un total de 24.979 millones de euros.
Respecto al sector de la alta y media-alta tecnología en España, en el País Vasco se encuentran el 5,3% de las empresas y genera el 7,8% de su VAB. Si solo se tiene en cuenta la industria manufacturera, el peso en este sector es mayor, llegando a suponer el 7,1% de las empresas y el 10,5% del valor añadido. 
En relación al ejercicio anterior, excepto el número de empresas que disminuye en una unidad, el resto de principales magnitudes mejoran. Así, el número de puestos de trabajo crece el 3,4%, la cifra de negocios el 14,5% y el valor añadido un 7,9%, resultando un tamaño medio, en 2022 en las empresas dedicadas a esta actividad, de 19,6 personas ocupadas.
En el sector de la alta y media-alta tecnología, el 13,1% de sus empresas realiza actividades de I+D, porcentaje muy superior al que se da para el conjunto de los sectores (1,1%). Además, este sector, que representa el 3,4% del total de empresas, reúne al 44,1% de las que realizan I+D en el sector empresa y ejecuta, con 1.027,8 millones de euros, el 74,2% del total del gasto en I+D interno ejecutado por el sector empresarial.
Respecto al personal dedicado a I+D por este sector, cabe señalar que, en el año 2022, se cifró en 11.076 personas empleadas en “Equivalencia a dedicación plena-EDP”, el 71,8% del personal que dedica el sector empresarial a I+D o el 50,9% si se compara con el que dedican todos los sectores a estas actividades. Las mujeres, 3.599, representaban el 32,5%. Del personal total EDP, 7.414 pertenecían a la categoría de personal investigador y, de ellas, 2.432, el 32,8%, eran mujeres. 
En cuanto a la innovación, al igual que sucede en I+D, se aprecian diferencias significativas entre el total de sectores y el de alta y media-alta tecnología. Así, en 2022 el 41,0% de los establecimientos de este sector fueron innovadores frente al 23,8% del total de sectores. En los establecimientos de 10 o más personas empleadas, estos porcentajes alcanzaron el 57,0% en el primer caso y el 35,4% en el segundo. 
 Los establecimientos de alta y media-alta tecnología destinaron en 2022 a actividades innovadoras un montante de 1.750 millones de euros, más de la mitad del gasto total de todos los sectores, en concreto el 53,2%. De este gasto, 1.573 millones correspondieron a establecimientos de 10 o más personas empleadas, lo que supone el 54,8% del total gastado en esta actividad por las empresas de ese tamaño.

La proporción de recursos destinados a I+D+I y el comercio electrónico de este sector fueron mayores que en la media del conjunto de los sectores
También queda patente que el sector de alta y media-alta tecnología destinó una proporción mayor de recursos a l+D+I que el resto de sectores, al observar las ratios de intensidad en “Innovación” y en “I+D interna”; esto es, las cifras que este sector dedica a gasto, tanto en innovación como en I+D, respecto a la cifra de negocios. En concreto, la intensidad en innovación es de 6,29% en este sector frente a 1,58% en el total de los sectores económicos. En el caso de la I+D interna, la ratio es de 3,77% para el sector y de 0,86% para el total. 
 Igualmente, tanto el uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) como el comercio electrónico están más extendidos entre las empresas de este sector que en el total de los sectores. Durante el año 2022 el 54,4% de los establecimientos de este sector realizaron “comercio electrónico”, frente al 28,7% de los que lo hicieron en el conjunto de sectores.
Estos porcentajes vienen determinados por el 51,5% de los establecimientos de este sector que realizaron compras electrónicas, frente al 25,7% de los que lo hicieron en el conjunto de sectores, y del 16,4% de los establecimientos del sector tecnológico que realizaron ventas electrónicas, cifra que en el caso del conjunto de todos los sectores fue del 8,5%. 
 La repercusión que tiene este sector en el comercio exterior de bienes no es especialmente significativa. Mientras las exportaciones supusieron 1.009,4 millones de euros sobre un total de 32.721,4 millones, las importaciones alcanzaron 697,4 millones de los 29.661,6 millones de importaciones totales. Estas cifras representan el 3,1% y el 2,4%, respectivamente, sobre el total de exportaciones e importaciones.
Entre los productos más habituales en estos intercambios y para las exportaciones destacan: “Maquinaria y equipo mecánico” (35,0%), “Construcción aeronáutica y espacial” (18,6%), “Armas y municiones” (18,5%) y “Material electrónico, equipos y aparatos de radio, TV y comunicaciones” (13,8%). En importaciones, sobresalen “Material electrónico, equipos y aparatos de radio, TV y comunicaciones” (29,9%), “Instrumentos científicos” (22,6%) y “Maquinaria y equipo mecánico” (10,6%), no llegando al 10% ninguna de las categorías restantes.

La cifra de negocios del sector de la alta y media-alta tecnología ha aumentado un 42,6% desde 2010
Desde una perspectiva temporal más amplia, desde 2010, se observa como este sector ha ido aumentando su aportación de forma continua desde 2015 hasta el año 2020, año de inicio de la pandemia por COVID-19. En 2021 se inicia la recuperación y ya en 2022 obtiene máximos de la serie tanto en cifra de negocios como en valor añadido bruto y en puestos de trabajo. El número de empresas se reduce en una unidad respecto a 2021, año en que se alcanzó la cifra más alta.
La cifra de negocios del sector SAT está desde 2010 por encima de los 16.800 millones de euros, habiendo superado en 2017 los 20.000 millones y alcanzando su record en 2022 con 24.979 millones. Sin embargo, en 2020 esta cifra se reduce hasta situarse en 19.836 millones, recuperándose en 2021 y logrando el máximo en 2022, con un 14,5% más que un año antes y un 42,6% respecto a 2010.
Para el mismo período, 2010-2022, el número total de personas empleadas en las empresas SAT se ha incrementado en 7.139 personas, habiendo estado desde 2011 hasta 2017 por debajo de las 90.000. En el último año del presente análisis, la cifra total ha alcanzado las 98.653 personas empleadas, máximo de la serie, superando en un 7,8% la que se registró en 2010.
A su vez, en este intervalo de tiempo el número de empresas de Alta y Media-alta tecnología se ha mantenido siempre por encima del umbral de las 4.600, con unos porcentajes sobre el total de empresas de Euskadi que se sitúan alrededor del 3%, pasando del 2,9% en 2010 al 3,4% en 2022. En números absolutos, esto se traduce en 202 empresas SAT más que en 2010.
Por último, el valor añadido bruto se situa en 2022 en 7.259 millones, 1.152 millones más que en 2010, habiéndose mantenido siempre por encima de los 5.700 millones.

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