Un total de 14.706,5 millones de euros esperan recaudar las haciendas vascas en 2018, lo que supone un 2,2% más de lo previsto. Una cifra que permitirá al Ejecutivo autónomo elaborar unos presupuestos para 2019 en los que se aumentará el gasto público y la inversión.

Por sexto año consecutivo, la recaudación por impuestos en Euskadi batirá en 2018 un nuevo récord. Las haciendas forales vascas prevén recaudar 14.706,5 millones de euros, lo que supone un 2,2% más (315,2 millones adicionales) que lo previsto inicialmente y un 6,6 % más que la recaudación real de 2017. Así se puso de manifiesto en la tradicional reunión de octubre del Consejo Vasco de Finanzas Públicas (CVFP), un órgano donde se sientan el Gobierno vasco, las tres diputaciones y una representación de los ayuntamientos, a través de Eudel. Además de las previsiones de recaudación para este año, el CVFP avanzó una primera estimación para 2019 que, de cumplirse, volverá a suponer otro récord: 15.265,4 millones de euros.
En concreto, este año se espera recaudar por IRPF 5.409 millones de euros; por el Impuesto sobre Sociedades, 1.349, y por IVA, 5.687. Esto supone un incremento del 6,6 % respecto de la recaudación real en 2017, sin tener en cuenta el efecto del acuerdo sobre el Cupo que supuso una inyección adicional de unos 600 millones de euros a las arcas vascas.

Los buenos resultados fiscales permitirán al Gobierno vasco contar con más “oxígeno” y un margen de maniobra “adicional” para elaborar los presupuestos del próximo año, según el consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu. Azpiazu ha reconocido que la mejora de la recaudación va a posibilitar dar un “arreón” a las inversiones en los presupuestos del año próximo, en torno al 7%. En su opinión, las cuentas del año que viene son una “oportunidad” para “acometer proyectos” y mejorar la financiación de servicios públicos.
Sin embargo, a pesar de que la recaudación se ha disparado, las instituciones piden prudencia ante las amenazas y los riesgos exteriores, así como por la desaceleración económica que se prevé en el futuro. Por ejemplo, el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, ha hablado de la “cautela” en la que se deben mover las administraciones públicas de cara al futuro, especialmente por cuestiones como la subida de los tipos de interés y del precio del petróleo.
También el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, ha pedido “prudencia” porque las decisiones que se tomen en estos momentos van a ser “la clave de la competitividad de futuro”. Ramiro González, por su parte, ha pedido, asimismo, cautela ante las amenazas que plantea la “inestabilidad” causada por las decisiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y ha hecho alusión a las repercusiones que tienen los mensajes que se dan sobre la fiscalidad en torno el diésel.