En un escenario de claro decrecimiento, con una bajada estimada del PIB del 10,1% este año –aunque con fuerte recuperación el que viene–, el lehendakari Urkullu presenta un Plan de Reconstrucción de Euskadi que prevé comprometer 10.000 millones de euros en cuatro años para incentivar 135.000 puestos de trabajo y recuperar todo el empleo perdido.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha presentado ante el Consejo de Gobierno las bases del Programa para la Reactivación Económica y el Empleo, “sustentado en un Gobierno fuerte, estable y unido en pos de esta prioridad”, con la intención de que se apruebe en octubre. Se prevé poder comprometer más de 10.000 millones de euros en cuatro años con el objetivo de recuperar todo el empleo perdido, incentivando 135.000 puestos de trabajo. Este programa será coordinado desde Lehendakaritza, de forma compartida con los departamentos de Empleo y Trabajo, y de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente.
El nuevo programa –orientado a “hacer realidad la gobernanza colaborativa, pública y privada. Auzolana para la Reconstrucción de Euskadi”, en palabras del lehendakari–, será compartido con las tres diputaciones forales y con los ayuntamientos vascos, a través de Eudel. Además, se recogerán las aportaciones de los agentes económicos y sociales, a través de la Mesa de Diálogo Social, el mundo cooperativo, las cámaras de Comercio, los sindicatos, las empresas y Elkargi.

Urkullu confía en contar a lo largo de este mes con los acuerdos de la Comisión Mixta del Concierto, el Consejo Vasco de Finanzas Públicas (cuya reunión está prevista para el 15 de octubre) “y un escenario de mayor certidumbre respecto a los fondos europeos Next Generation y los criterios de selección de los proyectos”. Sobre esta base, y con las aportaciones recibidas, el Ejecutivo aprobará “el Programa de Reconstrucción de Euskadi”.

Previsiones
Este programa de reconstrucción económica y social se presenta en un escenario de recesión, con una previsión de caída del PIB este año del 10,1%, según el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu. El Ejecutivo estima que cerca de 30.000 personas perderán este año su trabajo, lo que elevará la tasa de paro hasta el 11,2%. En 2021, esta tasa descenderá previsiblemente hasta el 10,7% y se crearán unos 15.100 empleos.
Por sectores, la industria será el sector más perjudicado, con una pérdida de su valor añadido del 14%, pero también la construcción y los servicios empeorarán notablemente este año. En el caso de los servicios, el descenso del valor añadido será del 9%.
No obstante, para 2021 se espera una intensa recuperación, situándose en el 8,9%, lo que supondría regresar a niveles de PIB de 2018. A medida que transcurran los trimestres, la actividad de los grandes sectores se recuperará. Será especialmente notable la reactivación de la industria (10,5%), impulsada por la apertura de los mercados exteriores. Los servicios mejorarán, pero su ritmo será algo inferior al del conjunto de la economía, por las dificultades que tendrá todavía el subsector de turismo y hostelería.