“El nuevo Lanbide debe incorporar de forma clara a las empresas cooperativas”
Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop. Confederación de Cooperativas de Euskadi
- Ainhoa Agirregoikoa
- 13-Marzo-2024
Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop. Confederación de Cooperativas de Euskadi. Foto: Konfekoop
A pesar de la ralentización de la economía global, Euskadi proyecta un crecimiento del 1,4% del PIB, por encima de la zona euro. En este contexto, las empresas cooperativas se encuentran inmersas en un proceso de adaptación de su producción y potenciando la innovación para mantener la competitividad. Para ello, redefinen las cadenas de suministro, la globalización cobra una nueva dimensión, y el arraigo de lo local adquiere gran relevancia. Ello ha llevado, según la presidenta de Konfekoop, Confederación de Cooperativas de Euskadi, Rosa Lavín, “a que hasta en los peores momentos de crisis, nuestra forma de ser y hacer empresa se ha mostrado más resiliente, ha seguido generando empleo y reinvirtiendo los beneficios para afrontar los grandes retos actuales y de futuro”.
Vamos, en principio, con el balance de 2023.
El balance es positivo. La economía vasca ha crecido un 1,8%, superando las expectativas. Además, nuestras empresas cooperativas han rebasado con éxito las dificultades derivadas de la escasez de suministros y materias primas debido al contexto geopolítico y al cambio climático. También ha sido un buen año para Konfekoop, que hemos ganado relevancia en la agenda política e institucional del país, siendo reconocida como un actor clave en las políticas activas de empleo. Podemos decir que el cooperativismo está en alza.
¿Qué opina de la recién aprobada Ley Vasca de Empleo?
Konfekoop ha sido un actor fundamental en su elaboración. Hemos aportado nuestra visión y conocimiento para que el texto fuera fiel reflejo de la diversidad del tejido económico y empresarial vasco. Esta ley representa un avance en las políticas activas de empleo y reconoce a las cooperativas como generadoras de empleo en Euskadi, con más de 60.000 puestos creados. Asimismo, abre la posibilidad a que Konfekoop participe en el Consejo de Administración de Lanbide.
¿Cómo puede afectar al modelo cooperativista vasco?
Nos preocupa que la presencia de las empresas cooperativas en el Consejo de Administración de Lanbide dependa de acuerdos futuros que hasta ahora han sido difíciles de alcanzar. Para construir el empleo del futuro, el nuevo Lanbide debe incorporar de forma clara y sin ambigüedades a las empresas cooperativas para que, entre todos, impulsemos las políticas de empleo que Euskadi necesita. Trabajaremos intensamente durante los próximos meses para que esta incorporación se haga efectiva. Lo hemos dicho muchas veces: la transformación de Lanbide no será completa sin la participación de las cooperativas.
"La ley de empleo reconoce a las empresas cooperativas como generadoras de puestos de trabajo, con más de 60.000 en euskadi"
¿Considera que el modelo debe estar más protegido por la legislación vigente?
Lo cierto es que se han dado avances importantes a nivel institucional en cuanto al reconocimiento de nuestro modelo socio-empresarial como agente generador de desarrollo económico y social que los gobiernos debieran tener en cuenta a la hora de definir sus políticas. Ahora necesitamos una legislación acorde con estos propósitos y que impulse nuestro modelo empresarial.
¿Cómo ha evolucionado el cooperativismo en Euskadi?
Su evolución está relacionada con los cambios que vivimos como sociedad: la transformación energética, la revolución tecnológica y el cambio demográfico. Somos parte de estas transformaciones, las integramos en nuestros procesos de trabajo y desarrollamos soluciones innovadoras que nos permitan seguir siendo competitivas.
¿Ha aumentado su presencia?
Estos últimos años ha aumentado nuestra presencia y notoriedad y claro ejemplo de ello es nuestra relevante participación en la Conferencia europea celebrada en Donostia, en la elaboración de diferentes leyes en el Parlamento Vasco o en diferentes foros estatales y europeos.
¿Qué le depara el futuro?
Estoy convencida de que el futuro pasa por nuestro modelo empresarial. Cada vez más empresas nos toman como referencia. Las empresas cooperativas somos empleo, somos innovación y somos sociedad. Allí donde hay cooperativas hay menos desigualdad y hay mayor cohesión social. Generamos impacto social positivo en nuestro entorno y nuestro principal atributo es que generamos actividad económica y por tanto creamos riqueza a nuestro alrededor.
¿A qué desafíos se enfrenta?
No somos ajenas a los cambios que vivimos como sociedad y en el mercado, por lo que nos tenemos que adaptar e incluso adelantar a los mismos a través de la innovación. La atracción y fidelización del talento es otra prioridad para nuestras empresas, que ofrecen la posibilidad de desarrollar un proyecto profesional y vital sin estar en manos de un mercado inestable y cambiante. Porque la competitividad de nuestras empresas no está reñida con el bienestar social y personal; eso es lo que ofrece el modelo cooperativo.
¿Y los retos a alcanzar?
Llegar a las personas jóvenes que van a protagonizar la Euskadi del futuro. Estamos trabajando en el nuevo Plan Estratégico 2025-2028 que sentará las bases de un nuevo tiempo y definirá nuevas prioridades. La fiscalidad está también entre nuestras líneas de trabajo; queremos participar de los espacios gubernamentales de reflexión que se están abriendo, en las diputaciones y en el Consejo Vasco de Finanzas.