La innovación, considerada hoy en día como un motor fundamental para el crecimiento de cualquier sociedad, constituye en Bilbao una vieja tradición. Esta ciudad ha tenido que reinventarse una y otra vez a lo largo de su historia para superar situaciones críticas, para adaptarse a los nuevos condicionamientos del entorno, para poner en marcha nuevas actividades o para buscar alternativas a aquellas que han ido quedando obsoletas. En este sentido, la regeneración urbanística y el nuevo modelo de ciudad por el que apostamos a partir de la década de los años 80 nos han posicionado como un paradigma, un caso de estudio que ha suscitado interés a escala internacional. Y ha reportado prestigiosos reconocimientos, uno de los más recientes, la declaración ‘Mejor Ciudad Europea 2018’ por la Academia internacional de Urbanismo con sede en Londres.
El éxito en este proceso –que no está cerrado y continúa con proyectos tan ambiciosos como el de Zorrotzaurre- es sin duda un mérito colectivo, fruto del esfuerzo compartido entre administraciones, instituciones públicas y privadas, personas emprendedoras, el mundo académico y demás agentes sociales. Todos han contribuido para que propuestas novedosas no se quedasen en meros proyectos sobre el papel, porque realmente ahí reside el valor diferencial de la innovación: partiendo de la creatividad, desarrollar ideas nuevas hasta generar un valor medible. O, dicho en otras palabras: transformar la realidad incorporando la novedad a la vida cotidiana. Si nos ceñimos a lo concreto, buena parte de las iniciativas del Ayuntamiento relacionadas con la innovación se canalizan a través del Área de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, área encargada de promover la generación de riqueza, potenciar Bilbao como destino turístico y de inversión, y promocionar el empleo a través de la creación y el crecimiento de las empresas con sede en esta capital. Impulsar la innovación en su sentido más amplio, como respuesta a las oportunidades que surgen en el mercado, y acercar las herramientas que lo hagan posible a toda la sociedad es uno de los objetivos de este Ayuntamiento. Ejemplo de ello son algunos de los programas que se detallan a continuación.

En el capítulo de la promoción empresarial desde edad temprana, destaca en primer término el proyecto piloto Sortzearen Abentura, puesto en marcha en 2017 y dirigido a alumnado de 3º y 4º de ESO, con el objetivo de dotar de competencias básicas para fomentar el espíritu emprendedor, y en el que el trabajo en torno a la innovación es uno de los componentes básicos.
Cabe mencionar así mismo la iniciativa Demola, modelo de innovación abierta en el que diferentes entidades plantean retos a equipos multidisciplinares de estudiantes en educación superior, desarrollando un proyecto de co-creación entre estudiantes y empresas que debe dar soluciones reales a los retos planteados.
En este mismo apartado de la promoción empresarial, pero más enfocada al comercio y a las Pymes, se encuadran los Programas Bilbao Ideiak Workshop (con el objetivo de generar y desarrollar ideas de negocio de una manera más creativa y dinámica) y los Talleres ICU, Innovación Centrada en las Personas (que ayudan a idear nuevas soluciones que aporten valor a las personas usuarias y más negocio a las empresas).
En cuanto al apoyo al tejido comercial de la ciudad, el CIB (Comercios Innovadores de Bilbao) sigue siendo un referente en cuanto a innovación, especialmente en programas que tengan que ver con la introducción y el uso de la tecnología como método de interactuación con la clientela.