La población ocupada creció en 6.000 personas en Euskadi en el cuarto trimestre de 2014, hasta las 898.000 (siete décimas más que en el trimestre anterior) y la tasa de paro se mantuvo en el 14,5%, según la Encuesta de la Población en Relación con la Actividad (PRA), elaborada por el Eustat. Como resultado de la evolución de la población ocupada y la parada, la tasa de actividad entre octubre y diciembre de 2014 se situó en el 57,5%, cinco décimas porcentuales por encima de la del período julio-septiembre.
Este ascenso de la ocupación afectó tanto a las mujeres, con 3.500 ocupadas más que el trimestre anterior, como a los hombres, que subieron en 2.500 su cifra de ocupados. Por territorios, en Bizkaia se registraron 2.500 ocupados más; 2.300, en Gipuzkoa, y 1.100, Álava.
La población ocupada aumentó en los servicios en 11.100 personas y en el sector primario en 300, mientras que descendió en la construcción en 1.700 y en la industria, en 3.700. La tasa de ocupación (el porcentaje de personas ocupadas de 16 a 64 años sobre el total de esas edades), aumentó medio punto porcentual con respecto al trimestre anterior, situándose en el 64,8%.
Por otro lado, el número de parados –es decir, personas que están buscando empleo, hacen gestiones activas de búsqueda y además están disponibles para trabajar–, se estimaba en 152.300 en el cuarto trimestre de 2014, medio millar más que el trimestre anterior, con una tasa de paro mantenida en el 14,5%, pero siete décimas inferior al cuarto trimestre de 2013.
Por territorios históricos, el número de parados aumentó en Bizkaia en 1.000 personas y la tasa de paro se situó en el 15,7%. El paro aumentó en 100 personas en Álava, dejando la tasa en el 15,8%. En cambio, en Gipuzkoa se registraron 500 desempleados menos y la tasa de paro se situó en el 12,1%.
Según Eurostat, la Oficina Estadística de la Unión Europea, en noviembre de 2014 la tasa de paro del conjunto de la Unión Europea se situaba en el 10% y la de España, en el 23,9%.

EPA
Por su parte, el INE hizo públicos los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) relativos también al cuarto trimestre de 2014. Esta encuesta refleja que Euskadi fue la comunidad autónoma con el mayor crecimiento de población activa, con 29.200 personas más en esa situación, en parte debido al empuje del empleo femenino. Este aumento de la población activa es una de las razones, no obstante, del aumento del paro registrado en 19.000 personas en el último trimestre del año; las expectativas de una mejora de la economía han llevado a muchas personas a buscar un empleo, cuando antes no lo hacían y no figuraban en las estadísticas como desempleados.
Además de ser la comunidad con el mayor crecimiento de población activa, Euskadi también fue en la que más creció el paro –724 personas más sin trabajo–, con lo que cerró 2014 con 174.100 desempleados y una tasa de paro es del 16'6 %, la segunda más baja de España, por detrás de Navarra. El dato de parados contrasta, sin embargo, con los contabilizados por Lanbide al finalizar el pasado diciembre, 165.771 personas, que sitúan la tasa de desempleo del 15,3%.
En la actualidad hay 874.500 personas trabajando en el País Vasco, cifra que representa el 57'7 % de los que están en edad de trabajar. Por territorios, la tasa de paro más alta sigue siendo la de Bizkaia, con el 18'12%; Álava tiene el 16'6% y Guipuzkoa, el 14 %. Según la EPA, Euskadi contabilizó 1.048.600 personas activas en el último trimestre del pasado año, tres décimas más que en el mismo periodo de 2013.
En el conjunto del año, la población ocupada de Euskadi aumentó en 2.500 personas, un hecho que resulta insólito desde el inicio de la crisis dado que las series anteriores siempre habían cerrado en negativo; especialmente en 2012, año que concluyó con 60.000 empleos perdidos, y en 2013, que también dejó por el camino otros 18.900 empleos.
Además, junto a los anteriores, los positivos datos de afiliación a la Seguridad Social registrados en diciembre –el mejor de los últimos diez años– apuntan a una progresiva salida del peor periodo de la actual recesión. En este sentido, hay que recordar que el balance de 2014 muestra un crecimiento de 12.073 afiliaciones frente a las 12.499 perdidas en 2013.

Diferentes formas de medir
Los datos en torno al mercado laboral ofrecidos por el Eustat, el INE y Lanbide a menudo difieren y crean cierta confusión. Una de las razones de la falta de coincidencia es que existen algunas diferencias metodológicas en cuanto al tipo de muestreo que el INE y el EUSTAT utilizan para la selección de las personas a entrevistar, así como para la ponderación que se le otorga a cada una de ellas.
En principio, el INE y el EUSTAT siguen exactamente la metodología de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para definir a una persona como desempleada, que en ocasiones contrasta con el perfil de las registradas en Lanbide.
Así, es posible que muchos desempleados de la EPA no hayan registrado o renovado su demanda de empleo en Lanbide, por lo que no figuran en las listas de paro registrado. O que muchos parados con restricciones en sus demandas de empleo, o que son beneficiarios de subsidios especiales por desempleo, pueden cumplir los requisitos para ser considerado como desempleado en la PRA o EPA, pero están excluidos de los registros de parados en Lanbide.
Y es posible, asimismo, que muchos de los demandantes de empleo que no pertenecen a los colectivos excluidos no estén buscando empleo activamente, con lo cual figuran como inactivos en la EPA.