Apuntes

Nueva dirección de las inversiones
Euskadi ha mantenido una senda sostenida de crecimiento del gasto en I+D+i y la apuesta actual es redireccionar esta inversión para conseguir priorizar el desarrollo tecnológico y arrastrar una mayor inversión adicional privada. Se trata de equilibrar la combinación de investigación, favoreciendo y fortaleciendo las áreas en las que más destacamos para acercarnos a los países de mayor capacidad tecnológica. Los recursos se centrarán más en las áreas en que el País Vasco cuenta con mayores capacidades industriales y donde se puede obtener el mayor beneficio productivo tanto del sistema como de su sostenibilidad económica. Incluso esos desembolsos conseguirán generar mayor inversión de las propias empresas y más retornos de proyectos, tanto estatales como europeos. Desde el punto de vista de la financiación, se prevé para el año 2020 una readecuación, en la que los CIC deberán avanzar hacia mayores ingresos privados, manteniéndose de forma similar en los centros tecnológicos y unidades de I+D empresariales.
Por otro lado, el modelo trae consigo una nueva forma de medir el uso de los recursos públicos y privados, para lo que se ha diseñado una estructura que contempla, entre otros, diversos indicadores para medir el nivel de productividad de cada agente.
Entre ellos, destacan el mix de actividad de cada desarrollador, el número de empleos creados en Nuevas Empresas de Bases Tecnológicas, su facturación o el número de proyectos internacionales con presencia de empresas vascas.

Más noticias de Portada / Azalera