"Año 2021: La vacunación general y las reformas son la prioridad"

FRANCISCO J. AZPIAZU SECRETARIO GENERAL DE CEBEK

FRANCISCO J. AZPIAZU SECRETARIO GENERAL DE CEBEK.

Afinales de enero, en nuestro Informe de Coyuntura y de perspectivas económicas, anunciamos una lenta recuperación para Euskadi debido a la persistencia de los efectos del Covid, la incertidumbre sobre la extensión de las vacunas y las dificultades para ver la luz al fondo del túnel por parte de las empresas. Asimismo, de las 450 empresas de Bizkaia participantes entonces en nuestra Encuesta de perspectivas económicas, solo un 54% habían alcanzado un nivel superior al 80% de su capacidad productiva anterior. Casi cuatro meses después, y a la espera de los resultados de nuestra Encuesta de Primavera, las dificultades y la lentitud en la recuperación lastran nuestro crecimiento. En enero planteamos una previsión de incremento del 6,5 % del PIB para este año 2021. Hace unos días, la Dirección de Economía del Gobierno vasco ha actualizado sus previsiones para el periodo 2021-2022, con una estimación de crecimiento para 2021 del 6,7% del PIB. A su vez, la ministra Calviño ha reducido su previsión inicial para España hasta dejarla en el 6,5%.
La velocidad en la vacunación es clave para contar con una recuperación económica rápida en Euskadi. Europa va muy lenta. En países como Israel y Reino Unido, los índices de coyuntura vaticinan un crecimiento importante de la demanda interna empujada por el consumo privado. Las empresas y las familias prevén escenarios de gasto y facturación mejores a corto plazo. Lo mismo ocurre en USA, donde la velocidad en la vacunación como la fortaleza de los estímulos fiscales impulsarán su economía a gran velocidad, con la esperanza de que arrastre también a Europa. Hablamos de un Plan de Empleo de 1,7 billones de dólares.
En relación a Europa y la llegada de los Fondos Next Generation EU, no cometamos el error de cuestionar el contexto y las circunstancias. Van a llegar con retraso, pero deben servir para implantar las reformas estructurales que necesitamos con urgencia: educación y empresa; pensiones; eficiencia de los servicios públicos; mercado laboral y políticas activas de empleo e incorporación de los/as jóvenes al trabajo, entre otras. Son una necesidad. De ahí que se requiera elegir bien los proyectos a financiar así como que los fondos lleguen a las pymes. Sin reformas no va a ser posible una recuperación económica sostenida en el tiempo ni se podrá atajar el déficit presente y futuro ni la hemorragia de las cuentas públicas.
Nos encontramos ante una crisis diferente a la de 2008. Esta vez está afectando más a países de economías menos avanzadas, a trabajadores/as menos cualificados/as y sobre todo a los jóvenes. Además, aquellos sectores y empresas con menos capacidad para adaptarse a la digitalización y la automatización lo están pasando mal y lo pasarán peor. Por ello, es importante que las estrategias de empleo vascas tengan en cuenta estas circunstancias y pongan el foco en dar respuesta a las necesidades actuales y futuras de las empresas. Estamos viviendo una transformación competitiva que requiere estar muy atentos a lo que ocurre en nuestro entorno. Las empresas están invirtiendo ya en digitalización y automatización. Por ello las personas, sus competencias y habilidades, deben dar respuesta a este nuevo escenario. El empleo futuro va a depender de que seamos capaces de contar con empresas innovadoras, sostenibles, internacionalizadas y con un componente de digitalización elevado. Cuidemos a nuestras empresas tractoras, factor de progreso y bienestar indudable.
En este escenario, la continuidad de los ERTES se demuestra necesaria, pero sin que el acudir a esta figura suponga para las empresas la asunción de obligaciones, penalizaciones o limitaciones que impidan su recuperación o perjudiquen su competitividad. Transcurrido más de un año desde el inicio de la pandemia es ya un hecho que la recuperación de las empresas y del empleo va a necesitar de otras ayudas e instrumentos adicionales. Las empresas, que son el fundamento de nuestro bienestar, no necesitan más rigideces para el desarrollo de su actividad. Requieren poder adaptarse al momento económico con facilidad y rapidez, mediante acuerdos y estrategias de colaboración, sin que les impongan más trabas que las de los mercados, la competencia y un entorno cada vez más difícil.

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