Seleccionado el proyecto ganador del concurso de diseño de mobiliario urbano organizado por Tabakalera, Baskegur y UPV/EHU

“Replantearse para adaptarse”, obra de Maider de la Fuente y Lucía Pardos Arias, se construirá en la segunda planta del edificio, frente a Medialab, a lo largo de 2025

Infografía de “Replantearse para adaptarse”, obra de Maider de la Fuente y Lucía Pardos Arias. Foto: Tabakalera, Baskegur y UPV/EHU

El jurado del Premio Tabakalera-Baskegur ha seleccionado el proyecto ganador y dos proyectos finalistas del concurso convocado por Tabakalera, en colaboración con la Asociación de la Madera de Euskadi, Baskegur y la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UPV/EHU, para el diseño del mobiliario urbano de Tabakalera.
En la que ha sido la primera edición del concurso, el proyecto "Replantearse para adaptarse" de Maider de la Fuente y Lucía Pardos Arias, ha sido seleccionado como proyecto ganador, y ha recibido un premio de 2.000 euros. Según el jurado compuesto por las tres instituciones, “este proyecto se distingue por su propuesta, formalmente serena, y por la profundidad de sus ideas. La capacidad de organizar todo el entorno con un solo elemento demuestra una gran madurez y un tratamiento adecuado de la materialidad”. Más allá de su amabilidad formal, "Replantearse para adaptarse" es el resultado de un proceso integral que maximiza la reutilización de la madera, otorgando nueva vida a trozos que podrían considerarse residuos. La combinación de técnicas de fabricación digital utilizadas en el proyecto evidencia nuevas formas innovadoras de utilizar la madera.
"Replantearse para adaptarse" será implementado en el futuro hall de la segunda planta del edificio de Tabakalera, que actualmente funciona como vestíbulo de Medialab, y podrá albergar a unas 30 personas en lo que será un lugar de acogida, descanso y estudio, siempre en consonancia con el contexto de un centro dedicado a la creación contemporánea y la difusión del arte y la cultura. El proyecto cuenta con la colaboración de Joel Banús, Oriol Galí, Alex Ahedo y María Díaz.

Otros proyectos premiados
Además de la ganadora, dos propuestas han recibido el accésit ex aequo, con un premio de 500 euros cada una. La primera de ellas, "Prisma Hexagonal" de Raquel Irizar Ocina, crea una estructura compleja mediante la repetición de una única geometría. La organización topográfica lograda con la repetición de prismas hexagonales de diferentes alturas resulta espacialmente rica y responde adecuadamente a las condiciones del entorno. La segunda propuesta premiada con el accésit, "Lo-Construyendo dos mundos" de Iker Iturralde Mintegui, se caracteriza por su gran fuerza formal a pesar de contar con medios limitados. La organización del espacio mediante luces y elementos colgados del techo es elegante y respetuosa con el entorno existente, donde destaca especialmente la relación entre los círculos de luz colgados y las mesas ya presentes.
Asimismo, el jurado ha otorgado menciones especiales a tres proyectos adicionales: "All in One Plate" de Louis Fräntzki, Aaron Knaak, Mattea Müther y Wanda Glöckner, "Biltzen" de Alex Ahedo Tapia y María Díaz González, y "Contra Corrientes" de Aitor Monje López. Estas propuestas, que han contribuido al alto nivel del concurso, han destacado por su innovación y creatividad.

Colaboración entre Baskegur, UPV/EHU y Tabakalera
El concurso, organizado por Tabakalera en colaboración con la Asociación de la Madera de Euskadi, Baskegur y la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UPV/EHU, tiene como objetivo promover la creación e innovación en intervenciones para equipamientos públicos, con un énfasis especial en el uso de madera de proximidad con certificado de sostenibilidad PEFC.
La alianza entre Tabakalera y Baskegur es la primera de una serie de iniciativas destinadas a poner en valor la madera como un producto sostenible y con un papel fundamental en el diseño y la construcción del futuro. Esta colaboración no solo es un paso hacia adelante en la promoción de la creatividad y la innovación, sino también un compromiso conjunto con prácticas sostenibles que impulsan el desarrollo local y la economía circular. Los materiales que provienen de una gestión forestal sostenible aseguran mitigar el cambio climático, contribuir a la lucha contra la deforestación y mejorar la calidad de vida en áreas rurales, así como prevenir la despoblación. 

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