El Grupo Repsol obtuvo un beneficio neto de 1.466 millones de euros en los primeros nueve meses del presente año, frente a los 2.171 millones del mismo periodo conseguidos en el ejercicio anterior. Por otra parte, el beneficio neto ajustado se situó en 1.637 millones.

Este último resultado incluía una plusvalía de 344 millones registrada tras cerrar, en mayo de 2018, la venta de su participación en Naturgy (anteriormente, Gas Natural). Además, la valoración de los inventarios de hidrocarburos que la compañía almacena fue mayor entre enero y septiembre de 2018 debido a unos precios del crudo y del gas superiores a los de este año, lo que supuso un efecto de 329 millones de euros. El beneficio neto ajustado se situó en 1.637 millones, frente a los 1.720 millones del mismo periodo de 2018.
Repsol demostró su capacidad de generación de valor y adaptación para lograr estos resultados, en un contexto marcado por la caída de los precios de las materias primas respecto a 2018, con un entorno débil para el refino y la actividad de Libia suspendida durante una parte del presente año.
En lo que respecta a las materias primas, el crudo Brent se negoció a una media de 64,6 dólares por barril entre enero y septiembre, con un descenso superior al 10% respecto a la cotización media del mismo periodo de 2018. El crudo WTI tuvo un precio medio un 15% más bajo, 57,1 dólares por barril, mientras que el gas Henry Hub se situó en una media de 2,7 dólares por MBtu, con un descenso del 7% respecto a 2018. En este contexto, la compañía ha continuado generando valor y ha incrementado su flujo de caja operativo en un 22% durante el año, hasta los 4.074 millones de euros.

Según su consejero delegado, Josu Jon Imaz, “en un entorno macroeconómico más débil, el robusto desempeño del flujo de caja de Repsol muestra la solidez de nuestra estrategia”. Esta fortaleza de la caja libre y de los resultados motivó que, el pasado mes de julio, el Consejo de Administración acordase proponer a la próxima Junta General aumentar la retribución al accionista un 5% del capital social a 31 de diciembre de 2018, lo que se añadirá a las amortizaciones ya realizadas.
De otro lado, Repsol ha adquirido por 325 millones de dólares la participación del 63% de su socio, Equinor, en el campo petrolífero Eagle Ford, en Texas (EE.UU.). De esta manera, la utility pasa así a controlar el 100% del activo y a ser su operador.