La transición energética generada por la progresiva descarbonización de la economía ha llevado a las grandes empresas tractoras del sector a plantear potentes inversiones en innovación y nuevas infraestructuras en un proceso que, a su vez, está ‘enganchando’ en la red a proveedores y empresa auxiliar.

El negocio eléctrico ha visto sacudida su estable evolución de más de 100 años con la llegada de las nuevas directrices en materia de sostenibilidad y medio ambiente contenidas en el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, viéndose obligadas las empresas productoras y distribuidoras a adaptar sus modelos de negocio a los nuevos tiempos y demandas de los usuarios, haciendo de la sostenibilidad un factor de competitividad y rentabilidad.
Con el fin de dar un fuerte impulso a la transición hacia una economía baja en carbono. y en su apuesta por las energías renovables, Iberdrola, primer productor de energía eólica en España, con una potencia instalada de 5.770 megavatios (MW), prevé acelerar sus inversiones en el corto plazo para la instalación de 10.000 nuevos MW y la generación de 20.000 empleos hasta 2030 en distintas zonas de España, especialmente en Canarias y Extremadura.
Para otra gran empresa tractora del sector como Petronor, la descarbonización de la economía no supone una amenaza sino que como afirma su presidente, Emiliano López Atxurra, significa “eficiencia energética” y la oportunidad de pasar de ser una refinería convencional a convertirse en la empresa multienergética “más moderna del mundo atlántico europeo” para lo cual viene realizando importantes inversiones, superiores a los 90 millones de euros anuales, en tecnología e infraestructuras. En este sentido, el pasado mes de octubre colocó la primera piedra de sus nuevas instalaciones, que harán más eficientes todos sus procesos de producción.

En alcanzar mayores cotas de eficiencia colaborarán también, entre otras muchas, empresas como Velatia, Arteche o Ingeteam, proveedoras de servicios integrales y soluciones tecnológicas punteras tanto en la generación como en el transporte, la distribución y el consumo de la energía y siempre enfocadas a la eficiencia y la sostenibilidad.
La ingeniería avanza
Velatia, en concreto, ha encauzado su negocio hacia el objetivo de dotar de inteligencia artificial a las redes eléctricas para que puedan integrar los recursos de la generación renovable y el coche eléctrico. Recientemente, además, ha obtenido del BEI financiación por 32,5 millones de euros para poder incorporar nuevas tecnologías digitales a los productos que desarrolla para las redes eléctricas.
En la misma línea, Arteche acaba de inaugurar una nueva planta en México, con una superficie de 10.000 m² y una inversión de más de dos millones de euros y que incorpora importantes mejoras tecnológicas en procesos clave, así como la utilización de sistemas automatizados, lo que supondrá un importante incremento de la capacidad productiva. Otra gran proveedora energética, como Ingeteam presentaba en el reciente certamen WindEurope su última tecnología en concertidores, como referente global en energía eólica, con una potencia mantenida de más de 8,6 GW, y más de 12 GW de potencia renovable total.
También es una referencia, en este caso como empresa diseñadora de plantas de generación la ingeniería Idom que en su haber cuenta con el desarrollo de 21 plantas termosolares en distintos países, utilizando diferentes tecnologías; de cuatro plantas de biomasa en Canadá, Colombia y Estados Unidos; y de varias incineradoras. Acumula, asimismo, una dilatada experiencia en energías renovables prestando sus servicios de ingeniería en multitud de proyectos de diferente alcance.
Junto a ella, en abril se supo que Sener participará en un gran parque eólico marino flotante que Cobra está construyendo a 15 kilómetros de la costa escocesa de Aberdeen y que está previsto que entre en funcionamiento en 2020. Los trabajos de esta ingeniería abarcarán desde la supervisión de la fabricación de las plataformas flotantes hasta el análisis de viabilidad técnica del montaje de los aerogeneradores. También en el ámbito offshore, otra ingeniería vizcaína, Saitec llegaba con su tecnología para plataformas eólicas marinas SATH –Swinging Around Twin Hull- a Estados Unidos y firmaba el pasado año un convenio con la firma hispano japonesa Univergy para la creación de una 'compañía de propósito especial' (SPA, en inglés) para el desarrollo de proyectos eólicos marinos en Japón.