MÁS DE 25 AÑOS DESPUÉS, LA APUESTA VASCA POR LA CALIDAD AGROALIMENTARIA SIGUE SIENDO UNA PRIORIDAD COMO INSTRUMENTO PARA FOMENTAR Y CONSOLIDAR LA COMPETITIVIDAD DEL SECTOR EN BASE A LA EXCELENCIA DE LOS PRODUCTOS.

Ya han transcurrido 27 años desde la distinción del Queso Idiazabal como Denominación de Origen y 25, desde el reconocimiento de la D.O. Txakoli de Getaria y la creación del distintivo Eusko Label, y con el paso del tiempo se ha puesto de manifiesto que la apuesta del Gobierno vasco por la calidad fue un acierto en un mercado cada vez más globalizado en el que los consumidores buscaban productos garantizados con marcas públicas y oficiales. En la actualidad, el sector agroalimentario vasco sigue apostando día a día por mejorar su calidad, idear nuevos productos y optimizar la seguridad alimentaria y entidades como la Fundación Elika, Hazi y centros tecnológicos como Azti y Neiker, entre otros, trabajan con estos objetivos.
Así, los retos futuros de los distintivos de calidad y origen apuntan a su utilización como herramientas para fomentar y consolidar la competitividad del sector. Según afirma Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno vasco, en su participación en un curso de verano de la Universidad del País Vasco, “tenemos productos de gran calidad, fruto del esfuerzo de un sector primario cada vez más profesionalizado y comprometido con la puesta en valor de los productos a través de las certificaciones y distintivos de calidad. Por ello, seguiremos acompañando a los productores locales en su apuesta por la mejora continua, por dotar a sus productos de un valor añadido diferencial basado en la excelencia”.

Eusko Label, la principal
La primera y principal marca de garantía de origen y calidad para el consumidor en Euskadi es Eusko Label, gestionada por la Unidad de Marketing y Certificación de Hazi. Esta unidad, además, realiza las labores de control y certificación de los productos Eusko Label, Euskal Baserri, las conservas de Bonito y Anchoas de Cantábrico del País Vasco y las tres DOP de Txakoli: Bizkaia, Getaria y Álava; a su vez realiza inspecciones acreditadas para la DOP Queso Idiazabal, denominación que se creó hace 27 años en los que ha pasado de contar con unas ocho queserías a unos 124 productores que comercializan anualmente 1.300 toneladas de un queso que gana los más prestigiosos concursos internacionales.
Además de una garantía de origen y calidad para el consumidor, Eusko Label ofrece a los productores una herramienta de valorización de su trabajo, reforzando su competitividad en el mercado. Actualmente son 16 los productos certificados con la marca Eusko Label y dos de ellos, Euskal Okela y Pimientos de Gernika, están reconocidos por la Unión Europea como Denominación de Origen, IGP (Indicación de Origen Protegida).

Otro distintivo de calidad es la Denominación de Origen, el nombre de un lugar geográfico que sirve para designar un producto agroalimentario originario del lugar y cuya calidad o características se deben fundamental o exclusivamente al medio geográfico con sus factores naturales y humanos, y cuya producción, transformación y elaboración se realizan en la zona geográfica. Aquí tenemos las D.O. de Txakoli, Vino de Rioja Alavesa y Queso Idiazabal. Además, las conservas artesanas de bonito elaboradas en el País Vasco cuentan con un distintivo que las diferencia en el mercado por su procedencia, sistema de elaboración y calidad, que es la marca ‘Bonito del Cantábrico del País Vasco’.
Finalmente, la marca Euskal Baserri permite identificar las frutas y verduras que se producen en pequeñas huertas o explotaciones de los caseríos vascos. La proximidad del productor al mercado hace que estos productos Euskal Baserri se recojan en su punto óptimo de maduración preservando sus características de sabor.