“El valor social integrado generado, reto prioritario de la estrategia”
Ramón Bernal, director general de Lantegi Batuak
- Ramón Bernal
- 18-Julio-2024
Ramón Bernal, director general de Lantegi Batuak.
Cuando hablamos de responsabilidad social de las empresas, en una sociedad avanzada, esta debe entenderse como algo intrínseco a su actividad y no algo complementario. Si bien la rentabilidad económica ha sido la base de la sostenibilidad de un proyecto a corto y medio plazo, el impacto social que esta genera y la satisfacción de sus grupos de interés son fundamentales a largo plazo y debe ser la guía que oriente las decisiones estratégicas.
Durante años, ha sido inevitable que el resultado económico haya sido uno de los retos principales de las estrategias de las empresas, también en las sociales. Lógicamente, del buen resultado empresarial depende nuestra propia pervivencia, como en cualquier organización que opera en el mercado. No obstante, hoy en día, esta búsqueda del beneficio económico como indicador del éxito está superada, y se da por hecho que las empresas buscan también cumplir una función social.
En el caso de Lantegi Batuak, hace más de una década que aplicamos la contabilidad social para medir el verdadero impacto que generamos. Esta complementa la contabilidad financiera, sus resultados se miden en euros y nos permite conocer el grado de cumplimiento de nuestra misión.
Aplicando la contabilidad social, cuantificamos aquellos aspectos de nuestra actividad que impactan en nuestros grupos de interés y que estos han identificado como aquellos que les aportan más valor. Medir, conocer y transmitir el Valor Social Integrado que generamos es conocer en su justa medida de qué manera estamos impactando en nuestro entorno. No solo eso, integrarlo en la estrategia nos permite orientar hacia ese camino la toma de decisiones.
A lo largo de los años, hemos comprobado que maximizar este valor y reportarlo a nuestros ‘stakeholders’ es fundamental. Por ello, este es el segundo plan estratégico en el que incorporamos la maximización del valor social como uno de los principales retos. Para este periodo 2024-2026, de hecho, es el primero de ellos. Los otros tres: desarrollo de las personas, sostenibilidad de nuestra actividad de mercado y desarrollo tecnológico, serán los que harán posible que se maximice este valor y, por tanto, cumplamos con nuestra misión.