El Orfeón Donostiarra ha cerrado en la Basílica de San Pedro del Vaticano una gira con tres conciertos en tres días y diferentes repertorios incluidos en su programa de 125 aniversario. La primera cita de la gira fue el Palazzo de Spagna, sede la Embajada de España ante la Santa Sede, que este año celebra su 400 aniversario convertida en la sede diplomática más antigua del mundo. A esta actuación le siguió el concierto en la Iglesia de San Ignacio de Loyola, enmarcado cuatrocientos años después de la canonización del religioso jesuita.
Como broche a esta gira, la actuación en la misa capitular de los domingos en la Basílica de San Pedro. En ella se dieron cita personalidades como Isabel Celaá, embajadora de España ante la Santa Sede, el diputado de Cultura Harkaitz Millán, el concejal de Cultura Jon Insausti y el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia.
Las voces mixtas del Orfeón interpretaron un repertorio con gran predominancia de la música sacra “pero ‘ad hoc’ en función del momento religioso”, explicaba José Antonio Sáinz Alfaro, director del coro. Para el canto final escogieron algunas píldoras de canciones de tradición vasca como ‘Agur Jesusen Ama’, de Amaia Zubiria, y ‘Aita gurea’, de Madina. “Y durante los actos nos hemos sumado a los cantos gregorianos de la Capilla Giulia”.